Capitulo 1

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Ese sonido que escucho.

¿Qué es?

¿Será este el infierno?

Que ruido.

No me deja dormir.

Mi bello sueño reponedor ha sido arruinado, que desgracia.

Uy, para, un momento ya no se escucha nada será que Diosito me habrá escuchado.

Creo que pasaron solo 10 minutos y otra vez se volvió la tortura.

Escuchar el mismo ruido

Maldición

Para mí levantarme es una de mis torturas.

La solución más fácil sería dormir todo el día, algo tan magnífico.

Si me pagarán por dormir, yo ya sería millonario.

En otra vida seguramente me encontraría en mis aposentos descansando hasta medio día, si es que no se puede más.

De un momento a otro sacandome de mis hermosas pensamientos, mi queridísima hermana asota mi puerta

— Mejor rompe la — digo de forma inaudible

— JULEEN —escuchar la voz de mi hermana y aparte escuchar el ruido que previene del celular, son cosas que no recomiendo escuchar cuando apenas me levanto — vamos levántate

Porque me hace eso

Porqueeee

Ayudaaa

Ayúdenmeeee

Esperen

¿Que tiene en su cara?

¿Que es eso?

―Juls ― Creo que mi rostro expresaba el susto tremendo que me dio ― ¿Qué pasa, que tienes?

―Nada, nada ―¿Nada? porque quien no se asustaría si ve a su hermana con algo verde en la cara, su cabello todo despelucado y tenía algo debajo de los ojos medio raro — Sabes que lo fea no se te va a quitar ¿no?

— ¿Que acabas de decir pequeño mocoso?

— Nada de nada, solo digo que lo que sea, no me voy a levantar

― Sabes que ya deberías estar listo

― ¿Listo? ¿Para qué? ―creo que el golpe de ayer con la puerta del cobertizo hizo que se me zafó un tornillo

―¿Cómo que para que?, hoy es tu primer día de clases ― primer día de clases, que divertido ― vamos Juls levántate rápido, ya se te está haciendo tarde

―Un ratito más

— Levántate

— No quiero ir

―Vamos

― Mañana puedo ir

— No tengas miedo Juls, no se va a volver a repetir lo mismo, está vez será diferente, eres alguien nuevo — y enserio que lo era si les mostrara una foto de como estaba antes, ni creerían que soy yo.

— No le tengo miedo a nada

— Párate de una vez, me escuchaste― hay, hoy día sí que está de humor no me quiere ni ayudar — vamos, si no ya sabes quién va a venir ― de tan solo escuchar lo último dicho se me eriza la piel.

¿Mi día no podía ser peor no?

― Dime qué es Francis

— Ya vamos pequeño

El Diario De JulenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora