Probablemente ya estés algo familiarizado con el concepto de que los buenos objetivos son aquellos que son específicos y tienen un tiempo limitado, o los llamados objetivos SMART. Si alguien no tiene claro su camino y sus valores, es probable que se sienta abrumado y ansioso incluso con bajos niveles de estrés, mientras que alguien que sabe exactamente lo que quiere y por qué aparentemente puede profundizar y superar enormes desafios y reveses (opuestos/golpes).
Sabemos que las metas pueden aliviar el caos,la distracción y aportar claridad y enfoque a nuestras vidas. Pero conocer tus valores no te ayuda automáticamente a establecer metas. Debes asegurarte deliberadamente de establecer el tipo de objetivos que es más probable que se alcancen. Los objetivos SMART son una ruta desde donde estás hasta donde quieres estar: S es de específico. Esto reduce las distracciones por definición. Sé lo más claro posible. No te limites a decir lo que sucederá, ten claro lo que harás, en detalle.
M es de mensurable. Un buen objetivo se puede medir o cuantificar. El resultado no es vago ni está sujeto a interpretación. Responde la pregunta: ¿Cómo sabré que se ha alcanzado mi meta?
A es de alcanzable. Esto significa que es realista para ti, en tu situación. Un objetivo debería desafiarnos a ir más allá, pero debe ser posible y razonable.
R es de relevante. ¿Este objetivo realmente habla de tus valores más amplios? ¿El objetivo más pequeño encaja con el más grande y tiene sentido en el contexto?
T es de tiempo limitado. Establece una fecha límite en la que debe cumplirse la meta o esboza algunos límites de tiempo. Las metas
establecidas para <<algún día» nunca se materializan.A continuación,se muestra un ejemplo de un objetivo bastante pobre: «Quiero estar más saludable».
Este es el mismo objetivo, escrito para satisfacer cada uno de los criterios SMART: «Quiero comer al menos cinco porciones de diferentes frutas y verduras al día (es decir, cada porción es de 80 gramos), en mi esfuerzo por
tener una mejor dieta en general, y quiero mantener esto todos los días durante el resto del mes>>.Aquí, el objetivo es específico (son cinco frutas y verduras diferentes al día), medible (podemos rastrear 80 gramos), alcanzable (no es poco realista),relevante (tiene sentido para el objetivo más amplio de una mejor dieta) y de duración determinada (tanto a corto plazo ya que es diario, pero a largo plazo ya que se prolonga hasta fin de mes).
Ahora, los objetivos SMART no cambian la dificultad de las tareas que tienes por delante. Pero si te ayudan a dar forma y definir tu visión, para que puedas actuar con más eficiencia. Te hacen pensar más detenidamente sobre lo que estás haciendo realmente y cómo. Muchos de nosotros nos embarcamos en misiones con muy poca idea de los detalles, y solo terminamos decepcionándonos a nosotros mismos cuando el plan se desmorona rápidamente. Con un objetivo SMART, básicamente estás trazando un viaje desde el presente al futuro, y cualquier actividad seguramente tendrá más éxito cuando haya un plan claro y lógico para ello.
Puede parecer un poco obvio y cursi escribir literalmente tus metas, pero pruébalo y te sorprenderá lo poco clara que es la visión. Ajusta un poco tus metas y descubrirás que estar más concentrado en tu enfoque te hace más decidido a cumplir tu plan.Método Kanban
La mayoría de estos métodos comparten un principio fundamental: cuanta más información puedas sacar de tu cabeza (es decir, cuanto más organizado y eficiente seas), menos tendrás de qué preocuparte y menos pensarás demasiado. Kanban es un sistema visual para administrar flujos de trabajo, pero puedes usar muchos de sus principios para mejorar tu productividad personal. Esta es una técnica que se refiere al flujo real de trabajo y cómo podemos mejorarlo.
El método Kanban japonés se originó en un contexto de fabricación,como una forma de organizar cosas como fábricas para una máxima eficiencia. Aplicado a la vida personal,Kanban es ideal para observar sistemas y procesos que ya están en marcha y mejorarlos. Sin embargo, ten en cuenta que no puede ayudarte a identificar objetivos o configurar sistemas; más bien, te permite optimizar continuamente los sistemas que ya existen.
Los 5 principios básicos de la estructura de la metodología de Kaban son:
1. Visualización (la metodología de Kaban es totalmente visual).
2. Priorización (todas las tareas pendientes deben ser ordenadas en una forma coherente que facilite hacer las tareas).
3. Mejora continúa (cambio evolutivo).
4. Liderazgo en todos los niveles (todos y cada uno de los miembros del equipo,no solo el líder).
5. Calidad garantizada (sin margen de error).
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Deja de pensar demasiado
No FicciónLeé para obtener la motivación interior y callar tu escándalo mental