capitulo 4

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CAFÉ BRILLANTE

*NARRA ETHAN*
– Nick!– grite

–¿Ethan que pasa?– corrió hacia mi – ¿Quien es está chica?–pregunto confundido

–No la conoces, es amiga de Zack, está dormida o desmayada nose, lo que se es que está muy borracha y no se puede mantener en pie. Necesito que llames a Miqueas el hermano de Zack y le digas que venga a buscarla

–¿sabes dónde está ? – le indique y se fue lo mas rápido posible

Trate de sentarla en un sillón, me puse a pensar que si Zack me veía con ella me iba a matar, en unos momentos pensé en usar a Dalía como venganza hacia Zack pero rápidamente eliminé esos pensamientos de mi cabeza,al final ella no tenía La culpa y ni estaba enterada de lo que el me hizo.
Después de un rato Nick llegó pero no venía nadie con él.

– Miqueas está muy borracho, no creo que sea buena idea dejarla con el, es mejor que lleves a la chica a casa de sus padres

–Nose se dónde vive, no puedo dejarla sola aquí. Trae mi auto hasta la puerta de atrás del lugar la llevare a mi casa y a la mañana cuando esté bien se podrá ir. Llamale un Uber a miqueas y su amiga, es mejor que se vallan a su casa

Alce a Dalía y la lleve a mi auto, la deje en el asiento trasero.

Cuando llegue a mi casa, trate de despertarla Pero no funcionó, entonces tuve que alzarla y llevarla yo mismo, subiendo las escaleras ella abrió los ojos.

–mm muschacho onde estoy ?

– soy Ethan y estás en mi casa te traje por qué estabas borracha y no podías caminar – explique sereno

La verdad no se cómo entendi lo que dijo, estaba tan borracha que le costó fórmular esa pequeña frase.

–me toca la mejilla con sus pequeños y cálidos dedos–que luimdas pecas tienes esos ojos verdes resaltan con tu coulor de peluo eres muy hermoso

– Gracias – nose por qué pero me di cuenta que me sonroje un poco, pero trate de ocultarlo

Terminé de subir las escaleras y ella ya se había dormido otra vez, la acoste en mi cuarto la tape con unas mantas y cuando me estoy por ir siento como que me agarra suavemente de la mano, trate de soltarme pero apretaba con tanta fuerza que me tuve que sentar a el piso apoyando mi espalda en la cama

–oye nuiño de lindos ojos verdes quédate conmigo un rato– insistió apretando la mano con fuerza

Me quedé sentado como ella lo pidió, mirándola me di cuenta de muchos detalles de su rostro.
Es una chica de piel morena, sus ojos son café muy brillante, tiene el pelo oscuro y alguna que otra peca en su mejilla, se veía tan tierna durmiendo.

Pasaron unos minutos y me pude liberar de esas calidas manos, la tape porque estaba refrescando agarre una cobija y una almohada, y baje a domir al sillón del living.

Estaba durmiendo tranquilamente cuando un ruido fuerte e insistente, me obligó a despertarme.

–Ethan abre la puerta, se que estás ahí maldito imbécil– gritaron desde la puerta principal

Esa voz me resultaba muy familiar, enseguida me di cuenta que era Zack, considere no abrir, pero los golpes seguian sonando cada vez más fuerte así que tuve que ir.

Apenas abrí la puerta Zack se lanzo hacia mi y con violencia coloco sus manos en mi cuello y me empujó hasta chocar con el sillón.

No alcance a decir nada que el ya estaba gritando otra vez.

–¿¡Donde esta!? – grito descontrolado

– buenos días –dije con sarcasmo, y puse los ojos en blanco – si sigues gritando la vas a despertar y no creo que le guste– apunté hacia la escalera indicando dónde esta ella– está arriba en mi pieza acostada durmiendo, no le hice nada, no la toque, no le pegue, no la drogue y no la secuestre– puse los ojos en blanco– estaba borracha y tuve que traerla conmigo– explique sereno

–¿por qué mierda no la dejaste con Milka?– espetó

– está conmigo porque no la quise dejar con tu  hermano, el estaba muy borracho y no iba a poder cuidar de ella– seguí explicando –se callo y casi se desmayo en medio de la fiesta por suerte antes de que caiga al piso la agarre como no sabía a quién llamar decidí traerla acá

– te dije que nunca te acerques a ella – puso un dedo en mi pecho.

– ¿Prefieres que la deje sola, totalmente borracha tirada en el piso de un boliche ?– puse los ojos en blanco

– la próxima vez me llamas Ami – ordenó

– como tú digas – respondí cansado

Subió a zancadas las escaleras, y yo quedé esperándolo abajo, al minuto bajo con dalía en brazos, me dedico una mirada de odio y se fue.

Nota de la escritora:

Este capítulo está editado/arreglado ya que lo empecé a escribir sin mucha experiencia.
La cambie muchas cosas y agregue otras para que ustedes la puedan disfrutar ❤️.

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