Makoto siempre aspiró a ser un gran ninja sin pensar que ese sueño sería el desencadenante de un sin fin de actos completamente dolorosos para ella.
Y cuando volvió a toparse con aquella fría y oscura mirada, lo entendió todo. Él solo quería evitarl...
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• Dolor •
Los pequeños regresaban de la academia. Makoto y Sasuke, los pequeños al tan solo pisar el ingreso del barrio Uchiha sintieron que el ambiente era muy raro y denso.
En la cima de un gran poste yacía una figura extraña, fue captado por la más pequeña. Ella parpadeó y la figura mágicamente ya no estaba, fue algo sumamente muy extraño.
— No hay ni una sola presencia en la calle.. ¿Qué está pasando? Es muy temprano para que todos estén en casa con luces apagadas
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Sin querer tomó la mano de su hermano con fuerza, cabe decir que él también estaba tenso, presionó más el agarre y comenzó a correr jalándola.
Ellos se dirigían a su casa pero en un callejón vieron una escena aterradora…
Su respiración era muy agitada — ¿Sa-Sasuke?
— ¿Qué es esto? — demasiados cuerpos tirados por doquier, la mayoría con herramientas ninjas incrustadas en su cuerpo, todos completamente ensangrentados — ¿Qué fue lo que pasó aquí?
— ¿Pero qué-.. — no terminó, ya que Sasuke la tomó del brazo comenzando a correr sin mirar atrás — ¡Sasuke espera! Mira ahí — señaló el suelo — Son nuestros tíos — no podía ni llorar, eran demasiadas emociones
Sasuke se acercaba a verlos aterrorizados — Oh no… ¡Nuestros padres!
Cuando Sasuke los nombró, ella comenzó a correr en dirección a su casa, incluso corría más rápido que él. Abrió la puerta pero todo estaba en silencio y muy oscuro Se adentró a la casa con temor, ni siquiera pensó en quitarse las sandalias ninja por lo asustada que estaba.
Escuchó a Sasuke detrás de ella — ¿Padre? ¿Madre? ¿están aquí? — él si se sacó su mochila y sus sandalias ninja.
Inspeccionaban todas las habitaciones, hasta que se escuchó un ruido proveniente de la sala principal.
— Alguien está aquí — el miedo los invadía, ella quedó detrás Sasuke con la mirada perdida, mientras que él seguía con la respiración agitada.
