El Destino || Taylor Swift

4. Sentimientos

Sabía que mis sentimientos estaban confundidos, pero sabía una cosa y es que me tenía que dejar llevar, como dice mi madre "la que se quede hasta en tus peores momentos ella es la indicada", desde muy pequeña mi madre sabía que me gustaban las chicas y ella se lo tomó bien, ella me apoyaba en cada relación, y cada decisión que tomaba.

Cuando le conté sobre el programa, ella me apoyó, ella sabía que lo lograría, le dije que si entraría haría lo mejor para conseguir mis metas, y que iría con la cabeza alta si me echaran.

Al recordar sobre mi madre me dolió, ya que ella estaba muy lejos de mí, ella no podía venir a España ya que ella tiene una enfermedad y se queda en Londres para su tratamiento, la recuerdo siempre, tengo una pulsera con su inicial y la mia juntas, la tengo en la mano izquierda, nunca me la quito, ella ha luchado mucho por mi, le debo todo.

Al recordar a mi madre, terminé llorando, la hechaba muchísimo de menos, aunque hablásemos a diario un montón, duele no tenerla a mi lado, que me diese abrazos cada vez que me estresaba y pasar tiempo con ella, la necesitaba, pero tengo que ser fuerte.

— Hey Moni... ¿estás bien? — me preguntó Agoney.

— Si, ando pensando en mi madre, la hecho muchísimo de menos — le dije.

— Oh cariño, tranquila, yo también les recuerdo, ¿quieres ir al balcón conmigo y hablamos? — me preguntó Agoney a lo cual yo asentí.

— Pues ven Moni. — me dió la mano, agarramos unas mantas ya que hace frío afuera y fuimos hacía el balcón.

En el balcón estábamos hablando sobre nuestras familias.

— Y eso de que eres medio gringa, medio española, como se conocieron para hacer ese conjunto. — preguntó Agoney mientras que me reía por lo de gringa.

— Oh mi madre es de Londres, Reino Unido, mi padre fue a mudarse ahi por tema del trabajo, la conoció en un bar y pusieron una canción y esa canción es la favorita de los dos, eran amigos, muy amigos de hecho, y ahi mi padre se enamoró perdidamente de ella, el le pidió que sea su pareja en el bar que la conoció, y pidieron su canción para bailarla como en los viejos tiempos, 2 años despues se casaron y pensaron en tener una hija, y ahi salí yo. — le dije con una sonrisa.

— Parece una película de amor la historia de tus padres — mencionó Agoney con una sonrisa.

— Ya ves, cada vez que me iba a dormir, les pedía cada noche que me contase la historia porque pensaba que era un cuento pero la verdad era así. — le dije riéndome.

— Y porque estabas llorando — preguntó Agoney

— Oh, recordé la situación de mi madre, hace dos años perdí a mi padre, bueno... no murió pero el se marchó, nos abandonó a mi madre y a mí, no sabemos absolutamente nada sobre el, y eso duele, y hace un año exactamente a mi madre le detectaron una enfermedad, ahi se me cayó el mundo, mi madre y mi padre son muy importantes para mi, pero ahora veo y mi mundo está cayendo, mi padre ha hecho que no crea en el amor, ya que cada vez que la miraba a mi madre le decía "eres el amor de mi vida, nunca me marcharé" hemos vivido engañadas por el. Y no podré perdonar el dolor que le hizo a mi madre, menos a mí. — le dije a Agoney, lágrimas amenazaban por salir, sabía que hablaba demasiado pero necesitaba desahogarme, y el estaba tan preocupado entonces accedí.

— Mónica, lo siento por lo que has pasado, me niego a pensar lo mal que lo pasaste de verdad, ¿ Puedo abrazarte? — me reí por la pregunta mientras que mis lágrimas salían sin ningún tipo de problema mientras que Agoney me abrazaba con fuerza, eran de esos abrazos con las que te sentías segura y no querrer salir de aquel abrazo.