❝El Stripper❞ ➳『•MinSung•』

31

MinHo entró al departamento y, mientras se aflojaba la corbata, se dirigió hacia la cocina. Sin embargo, se detuvo en seco al escuchar a JiSung riendo.

—Eso no es verdad — dijo, riéndose—. Por favor, yo jamás dije eso, HyunJin. ¿Recuerdas nuestra primera cita? Fue un desastre. Tiraste tu helado sobre mí. Estabas tan nervioso...

MinHo se asomó por la puerta de su habitación y lo que vio no le gustó para nada. JiSung estaba tumbado en su cama boca abajo, con el celular en la mano, hablando y riéndose. Con HyunJin. Trató de no darle importancia. Trató de no sentir eso que la gente llama "celos". Pero la verdad es que por dentro se moría de ganas de quitarle el celular, gritarle a Hwang que dejara en paz a su chico y colgar. Sí, por dentro ardía de celos. No había manera de evitarlo, no cuando se trataba de JiSung.

El mencionado giró sobre el colchón y cuando quedó boca arriba, vio a MinHo apoyado en el marco de la puerta. Éste arqueó una ceja cuando se despidió rápidamente de HyunJin y colgó. Luego le sonrió y dio unas palmaditas en el lado derecho de la cama, invitándolo a acostarse junto a él.

MinHo trató de mantenerse firme, pero le resultó imposible, y en menos de lo que pensó, se encontraba acostándose a un lado de JiSung. Se movió hacia el borde de la cama para darle más espacio, pero lo agarró de la cintura y lo atrajo hacia él. Sonnrió y apoyó su cabeza en el brazo de MinHo, mientras éste le acariciaba la cintura con la mano.

—Hola, amor — dijo JiSung, acariciándole el pecho—. ¿Cómo estuvo el trabajo hoy?

—Bien, ¿y tú? ¿Con quién estabas hablando? —preguntó, aunque ya sabía la respuesta.

JiSung volvió a sonreír y a MinHo le molestó la idea de que HyunJin fuera la razón por la que él sonreía.

—Estaba hablando con HyunJin. Me llamó para hablar sobre los planes del divorcio.

—Pues te oí hablar con él, y no parecía que estuvieran hablando de eso—le dijo MinHo, elevando involuntariamente el tono de voz. JiSung lo miró con el ceño fruncido y, al darse cuenta de su error, añadió—. Perdón.

—Min, ¿qué pasa?

—Nada—cerró y abrió los ojos pesadamente. Luego suspiró—. Nada—susurró.

MinHo lo miró y sintió que se le estrujaba el corazón. Era tan hermoso que el simple pensamiento de perderlo le dolía. No podía imaginar su vida sin estar junto a él.

—Aún es tu esposo.

—HyunJin ya no es más mi esposo.

—Legalmente aún sigue siéndolo.

—Él ya tiene a alguien en su vida, MinHo — dijo acariciando su mejilla—. Su nombre es JeongIn, y ya están viviendo juntos. ¿Cuándo entenderás que HyunJin ya no forma parte de mí?

—¿Cuándo es el divorcio?

—En unos cuantos meses más. Tengo que reunirme con él para hablar de eso.

—Odio que tengas que verlo.

—Pero tengo que hacerlo si quieres que me separe de él.

—¿Y no puedes hablar con él simplemente por teléfono?

—MinHo — advirtió.

—Está bien—suspiró—. No estoy seguro de poder aguantar tantos meses. Te quiero ahora mismo lejos de ese idiota.

—Ya verás que los meses pasarán volando. Además, ya han pasado tres semanas desde que le pedí el divorcio a HyunJin, ¿ves lo rápido que pasa el tiempo cuando estoy junto a ti?

—Sí—sonrió—. Me pasa siempre cuando estoy contigo. Aun así, no me gusta que compartas tanto tiempo con él.

—Dios, eres tan terco —bufó—. Mi cuerpo y mi corazón te pertenecen, ¿cuándo te darás cuenta de eso?

—No lo sé — murmuró.

—¿Y si te dijera que te amo? ¿Eso cambiaría las cosas?

—¿Qué?

JiSung levantó la vista y apartó la cabeza del brazo de MinHo en el que estaba apoyado. Se miraron. Él sonrió tímidamente y eso llenó de ternura el corazón de MinHo.

—Te amo, MinMin.