Capítulo 2

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25 de Junio de 1980.

- Está muerto...Sirius - Se le escuchó terminar con dolor en su voz al licántropo.

"Está muerto" esas dos palabras retumbaban en la cabeza del de cabello azabache una y otra vez, estaba mirando a la nada pero pensaba en todo, eso no podía ser, tenía que ser una broma de muy mal gusto.

Se quedó disociando durante un tiempo indeterminado sobre la situación. Ambos amigos le hablaban pero él simplemente no escuchaba nada a su alrededor más que el "Está muerto".

- Sirius... - Por fin pudo escuchar algo más en su cabeza pero su nombre se oía tan lejano, tan ajeno a él, seguía perdido en sus pensamientos.

- Sirius mírame por favor - Era la voz de James que pedía entre un par de lágrimas traicioneras que por favor lo mirase.

- No...no....nonono....NO ¡NO! - Black pasó de no tener ningún tipo de reacción a tener una agresiva y de negación -. ÉL NO PUEDE ESTÁR MUERTO...

Sus amigos trataban de calmarlo pero él se rehusaba y se movía agresivamente para alejarse y que le soltasen. Sus amigos entendieron como debía sentirse así que no hicieron otro comentario, ahora solo intentaban dejar que se rindiera y se calmase para abordar mejor la situación.

- ¡No! ¡Él no...! Él no puede....No puede estár muerto...- Su resistencia por fin cesó, aún intentaba negarse al hecho de que su hermano, su Reggie estuviese muerto pero ahora en lugar de la agresividad, estaba devastado, su vista se había vuelto completamente borrosa.

Estaba llorando a mares mientras James y Remus lo abrazaban de una manera reconfortante, le brindaban algunas palabras de aliento con la mejor voz que tenían, intentaban ser fuertes por Sirius pero aquel Slytherin también tenía un lugar en sus corazones, una parte es porque era el hermano de Sirius, por otro lado porque sabían que no era un mal chico ya que de las pocas veces que lograban entrar en Grimmauld Place él jamás los delataba y les encantaba compartir pequeños momentos con él a pesar de que pareciese que les caía mal a Regulus, y finalmente por parte de James...significaba bastante porque aunque nunca se lo haya admitido a nadie, estuvo enamorado del hermano menor de su mejor amigo pero en el fondo de su corazón sabía que lo suyo jamás podría ser.

Black había estado llorando todo el día, absolutamente todo y estaba en su derecho, su hermano había muerto en lo que él creía que fue en su cumpleaños, no sabía exactamente el cómo ni el porqué de su muerte pero estaba en un estado deplorable. No tenía ganas de hablar ni de leer la carta en la que anunciaba el fallecimiento de su hermano.

Por lo menos así fue hasta que notó el extraño comportamiento de sus dos acompañantes con respecto a la carta de su madre y fue entonces que se animó a leerla.

En cuanto la carta estuvo en sus manos después de insistir repetidas veces a Lupin que se la diera, su cara cambió de una deprimida a una de ira total y enojo puesto que en ella decía:

"Eres un completo cínico Orión, ¿Cómo te atreves mandar este tipo de cosas aún sabiendo que tú hermano está fallecido desde hace casi un año, UN AÑO.

Madura, ya estás grandecito como para bromear con estas cosas y más cuando se trata de tu propio hermano.

En momentos como este agradezco que ya no estés con nosotros como tus familiares y que no hayas asistido a su funeral.

Todo esto probablemente haya sido tú culpa, tú deberías estar muerto no Regulus."

Estaba completamente enojado, desesperado y triste también, "¿De verdad habrá sido mi culpa?" Se preguntaba el joven Black, tal vez si hubiera hecho más por sacar a su hermano de ahí, esto no habría pasado, cosas como esa entre otras rondaban por su cabeza pero lo que más le afectaba era el hecho de que su hermano llevaba casi un año de muerto y él recién se iba enterando.

𝙿𝚞𝚛𝚎 𝙸𝚖𝚊𝚐𝚒𝚗𝚊𝚝𝚒𝚘𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora