Con Olor a Recuerdo

Prólogo

Caminando en la oscuridad de la noche, bajo la luz de la resplandeciente luna. Nada más hermoso para silenciar los pensamientos, para apreciar la luna, para perderse en los labios de algún amor fugaz. Una noche hermosa para disfrutar de la soledad, para sentir el frío y el calor al mismo tiempo. Sentir el calor de nuestro corazón y darnos cuenta que sigue frío. Pero no era nuestro caso.

-Ay no solo cállate y trágatelo todo -chispo el castaño

-A la no. Cómo quieres que me coma todo si es muy grande -mencionó la pelinegra haciendo pucheros. -Asher ayúdame -sugirió partiendo el pan a la mitad y dándoselo al pelinegro.

-¿Ahora que hacemos? -preguntó el pelinegro.

-Vengan

La pelinegra se levantó del frío suelo y empezó a caminar y los otros dos pequeños no dudaron en seguirla ni un segundo.

-¿A dónde vamos?

-No hagas preguntas Aiden. Solo camina ¿quieres? -Mencionó la pequeña de cabellera negra.

-Vale -terminó accediendo.

Y caminaron solos unos cuantos minutos más.

-Hemos llegado -anunció la pequeña

-Este lugar es hermoso

-Si es cierto

-¿Qué es? -Pregunto el pelinegro.

-Es nuestro nuevo cuartel -dijo la pequeña guía con orgullo.

-Me encanta

-Damas y caballeros, niños y niñas permitan presentarles al primer recluta oficial del cuartel Asher alias el paleta -concluyó susurrando.

-Que no me digas así, tu apodo no tiene sentido. Mi apellido es Palencia no paleta -bufó enfadado

-Ay ya, aprende a no ser una vieja dramática -bromeó el castaño

-Exacto, no seáis unas viejas chismosas cara de culo mejor seáis brillantes y estúpidas brillais brillais hasta dejar chocos a vuestros enemigos brillais hasta que os caigáis del cielo y se estrellen contra vuestro suelo y os rompais la cara -hablo con tono español exagerado y dramático

Los tres rieron juntos.

-Deja de decir tonterías y termina de anunciar a todos los reclutas nena -pronunció

-Vale voy -accedió. -Ahora nuestro más reciente reclutado os presento a Aiden alias el willito con cara de güerito -grito emocionada.

Automáticamente el pelinegro empezó a burlarse del castaño por el apodo que le acababa de poner la pequeña.

-No ahora voy yo -propuso en señal de venganza hacia su compañera de aventuras ante aquel apodo que no le había causado gracia. -Damas y caballeros. Niños y niñas permítanme presentarles al tercer recluta Aeris alias la nave espacial -concluyó con orgullo. Pero para su sorpresa la pelinegra empezó a aplaudir.

-Es increíble. ¡Eres mejor que yo! -Exclamó. -Al fin estás aprendiendo algo bueno, estoy muy orgullosa de ti -añadió llevando su mano al pecho actuando con dramatismo.

-Son malísimos con los apodos -se burlaba el pelinegro.

-Pero como tú eres tan bueno -mintió la pequeña en modo de burla

-Pero yo quería que te enfadas ante tu apodo -retomo el castaño balbuceando y haciendo pucheros.

-Ahora quien es la vieja berrinchuda -se burló del pelinegro dándole un golpe con el codo al hombro del castaño.

-Ay tú cállate. Oigan y ¿cómo se llamará el cuartel?

-Pilas A -propuso y pelinegro.

-¿Qué? ¿Por qué? -Eran las preguntas que se formularon los otros dos pequeños.

-No se han fijado -dijo con una leve sonrisa.

-¿De que?

-Los astros están alineados para crear un sistema perfecto, un sistema intachable, yo sabía que el universo quería decirme algo. Yo lo sabía muy dentro de mi, y no eran los frijoles...

-A ya ve al punto -interrumpió el más paciente de todos los que tienen mucha paciencia interinamente. Pero a Asher pareció importarle poco y siguió con su discurso.

-Los astros son hermosos e incomprendidos y hoy nos dice que es el destino que nave espacial, willito con cara de güerito y paleta estén unidos en matrimonio...

Los otros dos empezaron a reírse ante tan hermoso discurso, quizás les salían lágrimas de felicidad.

-Los astros nos dicen que estamos destinados a ser y no ser porque juntos somos fuertes, juntos somos baterías -concluyó con orgullo.

-¿Qué? -Preguntaron sin entender nada aún.

-Ay mis pendejos. Aiden, Aeris y Asher triple A por eso dijo que somos baterías pendejos. Que no hablan español o que -bromeó.