Esa mañana el chico de cabellos rubios se estiró entre las mullidas cobijas que lo abrigaban del frío de esos días de invierno. Jimin tallo sus orbes color miel para disipar el sueño que aún tenía.
– Buenos días mi pequeño ángel, ¿Dormiste bien?.
Una señora ya entrada en edad le saludo con alegría al chico de 18 años que terminaba por estirarse dentro de la cama, rápidamente busco sus pantuflas amarillas con unas abejitas bordadas en estás. Abrazó y sonrió enormemente de vuelta a la señora Cho.
– Listo para tu primer día en la universidad, dulcesito.
Él asintió con efusividad para luego dirigirse al baño no sin antes dejar un beso en las blancas canas de la mujer. Ella sonrió y continuó con el aseo de la habitación para luego bajar y preparar el desayuno de su pequeño ángel, así lo llamaba con amor y cariño.
– Monnie, amor. . . Eres un encanto, gracias por acompañarme a dejar a Minnie en su primer día en la universidad.
Un chico de cabellos castaño claro daba un pedazo de panqueque con dulce de leche a su novio el cual lo recibía gustoso. Jugaban melosamente en tanto terminaban de desayunar y esperaban por Jimin.
Un par de minutos más entro por aquella puerta el lindo chico con esa mirada que irradiaba una luminosidad reconfortante.
– ¡Hola cariño!, ¡Buenos días!, ¿Estás listo para ir a la universidad?.
Seokjin hablo de manera dulce a su hermano menor en tanto Namjoon lo soltaba de la cintura ya que lo mantenía hace unos segundos abrazado y pegado a el.
– Hola Minnie, ¿Así que hoy los hermanos Park quieren enamorar a medio Seúl?, ah. . .
Dijo algo divertido el moreno en tanto unas mejillas regordetas se ponían rojizas por el recién comentario. Jimin cubrió su rostro al sentir que el sonrojo subía escalonadamente en el.
– Nam. . . Basta, así no querrá salir de aquí jamás y sabes que me costó mucho el persuadirlo para que quiera ir a la universidad. – Seokjin habló a regaña dientes.
Jimin descubrió su rostro al estar mas relajado. Tomó el vaso con jugo de durazno el cual bebió hasta la mitad para después comer los deliciosos panqueques que había en su plato.
Si bien era cierto, Seokjin había hecho de todo para que su pequeño hermano aceptará por fin integrarse al entorno social. Hace ya diez años que Jimin se había encerrado en su entorno y en esa enorme casa. Además que tenía ese problema o como bien se dice esa discapacidad del habla. Jimin había adquirido esa condición después de la muerte de sus padres en ese fatal accidente dónde claramente él y su hermano serían los únicos sobrevivientes.
La universidad nacional de Seúl recientemente había lanzado un comunicado para dar a conocer que implemetarian un programa para recibir alumnos con capacidades diferentes en este año, Seokjin no perdió oportunidad para dejarlo en claro a su hermano.
– Bien cariño aquí tienes la hoja con tu horario. – Jin suspiro al empezar a tener ese arrepentimiento de tener allí a su pequeño hermano. – Tranquilo, cariño. Minnie es más fuerte de lo que imaginas, estará bien. ¿verdad Minnie?. – Nam hablo tranquilizando al mayor de todos los presentes. Jimin estaba algo temeroso por el hecho de estar en ese lugar y no conocer a nadie, más sin embargo mostró al mayor que estaba bien.
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» La voz de un corazón «
FanfictionJimin es un chico con un pasado demasiado triste, a causa de ello perdió el habla. Yoongi el chico malo de la universidad, no le interesa en absoluto su vida, el encontrarle el sentido mismo. ambos se conocerán aún si no lo quieren así. su destino e...