from enemies to lovers

number 3

Era un hermoso día en el pueblo, era de mañana y todos estaban haciendo sus cosas, unos minando, otros construyendo, y.. otros molestando.

Juan y Spreen estaban minando, y Juan le había invitado a ir a su casa si es que aquel oso tenía tiempo.

" Entonces, irás? " - dijo el chico con gafas mientras seguía minando y buscando materiales

" No lo sé, si tengo tiempo de sobra iré a tu casa pero no te esperes que esté por allá. " - decía Spreen.

Los 2 muchachos después de un rato, salieron de la cueva mientras iban caminando por los hermosos paisajes que este pueblo tenía, Spreen se había desviado del camino, claramente tenía muchas cosas importantes que hacer y no tenía tiempo para estar tanto tiempo payaseando o solamente coqueteando con alguien que ni siquiera estaba enamorado de él.

Por otro lado, Juan sintió que ya lo había molestado pero.. No podía vivir sin la compañía de aquel oso, era lo que más necesitaba, ya que con él se sentía seguro pero solamente se fue caminando hacia su casa, estaba tan cansado por el día de hoy, solamente quería llegar a descansar y dormir una gran siesta.

Juan ya había llegado a su casa, abrió la puerta para luego entrar y solamente buscar su cama y tirarse, quería dormir como si no hubiera un mañana pero, se acordó que quizás venga ese oso..

" No creo que venga, tiene cosas más importantes que hacer y no tiene tiempo para estar con un pendejo como yo. " - dijo, para después acomodarse e intentar dormir.

El rato pasaba pero no se podía dormir, siempre que lo intentaba, estaba ese estúpido oso en su mente, no sabía el por qué, pero no se lo podía quitar de su mente, no estaba enamorado de Spreen o algo por el estilo. O solamente no tenía tan claro los sentimientos que tenía por él?

" No estés pensando en estupideces Juan, ese maldito oso es de lo peor, pero.. Es tan amable conmigo de vez en cuando. " - se decía a si mismo, no se acordaba que había dejado la puerta abierta de su casa y pronto había escuchado una voz familiar.

" Así que vos pensás que soy de lo peor? Tampoco me veas como el villano de tu historia, gafotas, pero que lindo que también me estés tirando uno que otro halago " - dijo Spreen, estaba dentro de la casa de Juan ya que si iría, y como estaba la puerta abierta, tenía que aprovechar un poco la oportunidad.

" y tú desde cuando estás aquí?! " - dijo Juan mientras intentaba calmarse, habrá escuchado todo lo que dije?

Spreen solamente se puso a reír y después se quedó un gran rato en la casa de Juan, hablando y riendo los 2 juntos pero.. Spreen quería decirle algo y tenía esperanzas de que Juanito le dijera que sí.

" Eu, Juan, yo me preguntaba desde hace un rato si.. querías salir conmigo, una cita de amigos " - después de decir eso, Spreen se había puesto algo colorado pero podía disimularlo bien, aunque solamente se quedaba quieto pensando en las respuestas de Juan.

Hubo un silencio en toda la casa, ellos 2 se miraban fijamente, hasta que Juan habló.

" ¿Una cita? Eso suena bien, no veo porque tengo que negarlo, me gustaría salir contigo aunque sea como amigos, iré a tu cita " - dijo con una sonrisa mientras miraba a la ventana, ya era muy noche y habían muchos monstruos afuera.

" Supongo que te tienes que ir Spreen, ya es muy noche.. " - decía el castaño mientras miraba a Spreen.

" Juan, ¿Me puedo quedar en tu casa? No haré ningún desastre, te lo prometo " - dijo el oso, era una excusa para estar más tiempo con él, quería pasar una noche con el castaño y dormir juntos, eso si, solamente si lo dejaba quedarse.

" ¿Te quieres quedar en mi casa? Pues.. No veo ningún problema con que te quedes, pero sin hacer desastres porque me costó hacer la casa " - decía el castaño mientras le hacía un espacio a Spreen en la cama para dormir, no dejaría que salga con el peligro que había afuera.

" Gracias, gafotas " 

Los 2 se acomodaron para dormir, no durmiendo en su lado, durmiendo cómodamente para después, dormirse abrazados los 2, eran ellos dos y la noche con las hermosas estrellas.