10/24/1987 ― Sábado 24 de Oct.
Era una tranquila mañana en Colorado, el cielo estaba casi despejado y la única hija de la familia Woods esta en su habitación durmiendo plácidamente en su cama. La luz tenue ingresaba por las persianas semi abiertas y esta misma le llegaba a la cara, la pelinegra cuyo nombre es Margot arruga la nariz al sentir la luz cálida en su rostro, esto hizo que abriera sus ojos.
―Agh... ―se quejó en voz alta cerrando sus ojos abruptamente al sentir el brillo en su cara. Ella se sentó al borde de su cama, se estiró mientras bostezaba.
Pesadamente, la azabache se levantó y caminó descalza hacía la puerta del baño. Toco la puerta tres veces y alguien desde adentro respondió.
―¡Ocupado!
―¡Mamá apúrate que tengo que salir a la calle! ―Margot gritó de vuelta fastidiada. Su objetivo era bañarse para no oler raro, pero seguro que sus amigas se bañan cada vez que les da la gana, o bueno, esa solo seria cierta rubia con padres cuestionables.
Camino por el pasillo y bajo las escaleras en dirección a la cocina para comprobar si el plato de comida de su gato estaba lleno, y fue un alivio para ella encontrar a su gatito comiendo atún
―¡Shiro! ―exclamó felizmente acercándose al pequeño felino gris, este mismo solo la miró por unos segundos y siguió degustando su plato. Shiro es un gato lindo, posee un pelaje grisáceo y ojos color miel, es un gato calmado que prefiere quedarse en casa que salir a buscar gatas por la calle.
Margot se arrodilló y empezó a rascar la cabeza de su gato. Shiro paro de comer y comenzó a ronronear de placer mientras cerraba sus ojos.
―Jeje ¿Te gusta que te rasquen ahí verdad? ―la pelinegra habló entre risitas, su mirada de repente paro en el reloj, la hora marcaba las once y media.
«Mierda» Pensó, le quedaba media hora para encontrarse con sus amigas, y todavía seguía en pijama.
Corrió a su cuarto y agarro el primer par de jeans acampanados y zapatillas que encontró, se puso encima un polo negro manga larga algo apretado y salió de su cuarto como si la estuvieran persiguiendo por detrás.
―Oye hija ya termine ¿Vas a usar el baño o...? ―Jane mira a su hija bajar las escaleras con tanta prisa.
―¡No! ―gritó la adolescente a lo lejos, mientras agarraba las llaves de la casa que se encontraban en el perchero para llaves.
𓆝 𓆟 𓆞 𓆝
Han pasado 10 minutos desde que salí de mi casa, ugh, siento que mis pies arden, ya deben ser las doce de la tarde, seguro que Ashley se va a encabronar conmigo; esa rubia desaliñada.
―¡Margot, ven estamos aquí! ―una voz misteriosa me llamó, levanté la mirada del suelo para ver quién me llamó, era Daisy y Ashley caminando por las calles. Daisy como siempre estaba sonriente, y Ashley parecía que no durmió hace 2 meses.
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We'll Meet Again...
Aléatoire«𝙉𝙤𝙨 𝙫𝙤𝙡𝙫𝙚𝙧𝙚𝙢𝙤𝙨 𝙖 𝙚𝙣𝙘𝙤𝙣𝙩𝙧𝙖𝙧...» [...] Desde aquel día en el que su padre comunicó a su familia que se mudarían a Colorado por negocios (Y por una experiencia cercana a la muerte para Kylie), la vida de Kylie no fue la misma, e...