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Capítulo 1: Resonancia

-Lazuli, ¿Puedes oirme? Ese misterioso poder despertará pronto- decía una voz misteriosa dentro de un templo en el que jamás estuve. Sin dudarlo decidí perseguir a esa voz para saber a que se refería pero aunque corriera no la alcanzaba. -Lazuli, siempre tuviste ese poder...- murmuró la voz misteriosa, cuando repentinamente un resplandor blanco me dejó ciego, y de ahí desperté en mi cama.

-Nuevamente tuve ese sueño recurrente, ¿Tendré algun poder que me sea desconocido realmente? O tal vez es mayormente agotamiento por los exámenes- Se dijo Lazuli mismo mientras bajaba a desayunar para ir a la universidad.

-Vaya, parece que tuviste una noche dura, Lazuli- dijo Marin, la hermana mayor; quien trabaja en una oficina y a su vez vive conmigo mientras sus padres están de viaje. -No tanto, Marin. solo un poco de cansancio por los exámenes, pero nada de gravedad- le contestó un poco nervioso por pena a que ella crea que la locura lo está consumiendo.

Por cierto, he olvidado introducir a nuestro protagonista. El chico de pelo negro, delgado y con vestimenta azul es Ishida Lazuli; un estudiante de geología de la universidad de segundo año. La mujer joven con el vestido azul claro es Ishida Marin, su hermana mayor quien no estudia, pero que actualmente vive en la casa ya que los padres de los protagonistas se encuentran en un viaje de negocios.

-No quiero llegar tarde así que ya me voy, Marin- dijo Lazuli mientras se ponía sus zapatos y se disponía a salir. En camino a la estación lo unico que pasaba por la cabeza de Lazuli era ese sueño misterioso y recurrente, -Mi poder, ¿De qué poder hablará esa voz? ¿Habrá algo en lo intuitivo?- eran algunas de las preguntas que resonaban en su cabeza.

Llegando a la universidad aparece una chica en bicicleta, con un traje deportivo de color rojo viniendo a toda velocidad. -¡Buenos días, Lazuli! ¿Listo para afrontar el día?- dijo Ruby, amiga de la infancia de Lazuli y fanática de los deportes mientras bajaba de su bicicleta con una gran sonrisa. Lazuli la miró con una sonrisa nerviosa y le contestó: -Claro que sí, ¿A qué venía esa pregunta, Ruby?- cuando de repente se les acercó caminando Maraki, amigo de Lazuli y de Ruby desde la escuela superior, inconfundible con su chaqueta verde y su pantalón negro; además de sus característicos anteojos y mochila llena de libros. -Buenos días chicos, vamos entrando que será hora de nuestra primera clase- afirmó Maraki en un tono cálido mientras los tres se dirigían al salon de clases.

Ya dentro del salon y sentados nuestros protagonistas se dispone a ingresar la profesora para impartir su clase. -Buenos días, clase. Hoy continuaremos estudiando los minerales. ¿Quién puede decirme que mineral es el siguiente?- exclamó la profesora mostrando un gran cristal en su mano. Sin dudarlo, Maraki se puso de pie y contestó firmemente: -Lo que usted nos está mostrando es un cristal de cuarzo, profesora. Uno de los elementos de mayor abundancia en la corteza terrestre y con varias aplicaciones conocidas-. La profesora y el resto del salon quedaron sorprendidos ante tal elaborada respuesta. -¿Cómo lo hiciste, Maraki? ¿Qué fue lo que te dijo que eso era un cuarzo automáticamente?- preguntó Ruby en un estado de sorpresa. -Seguramente fue la intuición que me lo dijo- respondió Maraki en una forma humilde.

-¿Intuición? ¿Sera posible que Maraki también...? Creo que es demasiada coincidencia- pensó Lazuli en su sorpresa ya que el también había sentido algo proveniente del cristal. -Lazuli, también lo sientes ¿verdad?- preguntó Ruby en voz baja al ver a sus amigos en una especie de trance. -Quedémonos despues de clase para poder hablar sobre este tema con mayor certeza- contestó Lazuli a Ruby y a Maraki.

Ya con la clase finalizada, los tres héroes permanecieron un momento en el salón hablando de aquello que pasó. -Pude escuchar un sonido proveniente del cristal, fue extraño pero asombroso- dijo Maraki al describir su experiencia. -¿Sonidos? Yo lo veía vibrar- contestó Ruby a Maraki tras haber contado su experiencia. -¿No les parece raro? Tu lo escuchaste y tu viste vibraciones, pero yo sentí las ondas de choque del cristal en mi a pesar de que estábamos considerablemente lejos- dijo Lazuli sorprendido. En eso Maraki tomó un libro de su mochila y comenzó a leer sobre el cuarzo. -Durante años el cuarzo se consideró como una piedra energética en varias culturas- leyó Maraki. -Entonces podemos decir que soy un cuarzo- dijo Ruby bromeando entre risas. -Si que lo eres, Ruby- contestó Lazuli entre risas, aunque eventualmente esas risas desaparecieron. Lazuli percibió los eventos de su sueño que provenian desde el cuarzo.

-Algo raro me está ocurriendo, algo frecuente- dijo Lazuli ligeramente preocupado. -También puedo sentirlo- dijo Maraki afirmando el sentir de la energía del cuarzo. -Pero, ¿quién es y por qué nos busca?- dijo preocupada Ruby. -Durante años se usó la energía de los cristales como método de adivinación y de purificación por miles de culturas, no solo la nuestra sino aquellas distantes y también muchas que quedaron olvidadas en el paso del tiempo- asentó Maraki respecto a la visión, dando a entender que existía alguien que nos estaba despertando desde algún lugar misterioso.

-¿Creen en este poder?- dijo Lazuli en dudas, -Hace mucho he leído sobre algo llamado "resonancia" que está vinculado a los cristales y a las piedras preciosas, y que solo unas pocas personas logran dominar- contestó Maraki ante la iniciativa de Lazuli.

Mientras los tres salían del salón tras una larga conversación sobre la resonancia y sus orígenes, Ruby agregó: -El templo que se encuentra en la base de la montaña es donde más puedo sentir esa resonancia al volver a casa-. -¡Nos aventuraremos en el templo entonces para resolver el misterio e iniciar una tesis sobre la resonancia!- dijo Lazuli. -¡No lo permitiré! Ese templo ha estado bajo vigilia de la familia Sakurai durante años y no podré permitir ninguna perturbación- contestó otro estudiante de la clase. -Yo, Garnet Sakurai protegeré el templo de la base de la montaña de cualquier invasor que quiera perturbar la paz del templo- dijo Garnet, un estudiante algo arrogante y un poco agresivo. -Y a partir de ahora son mis enemigos, acérquense al templo, si son valientes- desafió Garnet a los héroes.

-No solo nos acercaremos, ¡resolveremos un gran misterio de la humanidad! En marcha chicos- contestó desafiante Lazuli junto a Ruby y a Maraki en la búsqueda del misterio de la resonancia.

---CONTINUARÁ---