Capítulo 6: Intercambio.

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Aquella noche junto a familiares había logrado ser un caos total: Emma nunca pensó que no sería ella misma frente a sus abuelos, mucho menos con sus padres aunque, nunca mostró el lado más honesto de su vida. Igualmente, sentirse desorientada y sentir que nadie en ese lugar te conocía o simplemente no te comprendía, era extraño. Ni siquiera había tomado alcohol para perderse tan rápido.

Lo único que recordó fue a Jenna subiendo las escaleras, directo a su cama.

De la nada, un fuerte pitido la escandalizó.

- Jenna, no quiero... - murmuró pero nadie le respondió - apaga eso - ordenó.

Al no recibir respuesta alguna, miró a su alrededor pero no encontró a nadie, como sí estuviera sola.

En primeras instancias no le presto atención y continuó durmiendo, hasta que ese pitido la molesto una vez más. Molesta, buscó al causante de su falta de sueño.

- ¿Dónde diablos estás? - se preguntó a sí misma.

En poco encontró un celular escondido entre las sábanas: en la pantalla se mostraban las miles de llamadas perdidas de un número con el nombre de "pndj". Eso le era raro, ella no tenía ningún contacto con ese nombre asignado.

Con curiosidad, le regreso la llamada al número desconocido; en su espera admiro su alrededor, notando el tono verde de las paredes, las mantas con el logo de Slytherin, los miles de posters de Roronoa Zoro y de miles más. Las estanterías con figuras animadas y el escritorio con un desorden en medio de él. Ese lugar no era su habitación.

Después de los tres tonos, al fin, alguien contestó.

- ¿¡Cuándo pensabas contestar, estúpida!? - fue lo primero que escuchó del otro lado del celular.

- En primera, no sé quién eres así que, no me hables de esa manera - pidió.

- Oh, ahora no me conoces, T/N. ¿Qué diablos tomaste para olvidar a Loreta Arcienega? La chica a la que, hace unas horas, le contaste la estupidez que cometiste - refutó - diablos, T/N, nunca voy a comprender sí eres estúpida o te haces - se burló.

Emma abrió los ojos con fuerza. ¿Le habían llamado T/N?

- Eh, no sé de lo que hablas - farfulló.

- Oh, ya veo, no quieres hablar de eso. Es una falta de respeto que no quieras contarme a fondo el porque rechazaste a Emma pero bien, aún puedo insultarte de mil maneras por esa razón - dijo.

De la nada, Emma escuchó a la chica del otro lado del celular tomar tanto aire que se asustó, tanto para colgar en ese mismo instante la llamada. No deseaba escuchar más insultos, no de parte de ella... T/N... ¿Qué diablos había sucedido?

Emma se levantó con temor de la cama, se dirigió a la salida e investigó un poco ese lugar, notando el parecido tan claro de la casa de los T/A. Era cómo sí se hubiera colado por la madrugada o algo así, pero lo que más le preocupaba no era él cómo había llegado a ese lugar, era saber dónde estaba T/N; seguro que debía ser una confusión el haber estado ahí.

Ella bajó las escaleras cuidadosamente, esperando no encontrar a los que podrían haber sido sus suegros. Pero lo único que encontró fue un hogar vacío, con una lasaña sin abrir en la cocina.

Todo le era más confuso cada vez, hasta que decidió entrar al baño, quizás el refrescarse el rostro le serviría de algo. Sin preguntar nada, entró a ese lugar y abrió el grifo, tomó un poco de agua entre sus manos y se restregó el rostro, no espero mucho para mirarse al espejo. De la nada, ella soltó un grito.

[EMMA MYERS] Myers' WishDonde viven las historias. Descúbrelo ahora