Makoto siempre aspiró a ser un gran ninja sin pensar que ese sueño sería el desencadenante de un sin fin de actos completamente dolorosos para ella.
Y cuando volvió a toparse con aquella fría y oscura mirada, lo entendió todo. Él solo quería evitarl...
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No cayó en cuenta que al despertar estaba en la cama del hotel. — ¿Cómo llegué aquí?
— Fui yo quien te trajo — habló Gaara sentado en la otra cama — Buenos días
"Gaara está viéndome dormida.." — en ese momento se sentó muy rápido — "Mi cara en las mañanas es un asco"
— Eh, sí, buenos días Gaara — tapó su cara muy rápido — Un momento por favor, iré al baño
"Yo tenía razón.. al verme al espejo tenía unas ojeras muy voluminosas y la baba seca en la comisura de mis labios" — Soy un completo desastre — "Y lo peor es que Gaara me vió" — Que vergüenza — chilló frente al espejo — Escucha bien Makoto, esta no eres tú — se señaló ella misma en el espejo
Rápidamente lavó su cara borrando todo lo que no le gustaba. Sonrió satisfecha por el cambio que logró.
— ¿Y Naruto? — no estaba en la habitación
— No estaba cuando llegamos. — respondió tranquilo — ¿No te dijo nada o no te dejó alguna nota que diga donde fue?
— No..— se sentó tratando de pensar en donde podría estar — No dijo nada..
— Lo más seguro es que Kankuro o Temari estén con él. Iremos a verlos. — dijo saliendo por la ventana
"Espero que así sea.." — pensó con cierto miedo
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Cuando Temari y Kankuro los vieron llegar, se aproximaron a ellos con cierta alegría.
— Vaya, pero si ustedes pasaron toda la noche juntos..— dió una sonrisa curiosa a lo que Temari le dió un leve golpe en el hombro
— ¿Han visto a Naruto? — Gaara evadió por completo su comentario
— No — pensó un momento — ¡Es cierto! Me dijo hoy en la mañana que iría a dar un último recorrido a la aldea porque estaba aburrido solo.
— ¿Por qué haría eso? Si ya había dado un recorrido ayer con Kankuro…
— Seguro no los quería molestar a ustedes dos — susurró pero de igual forma lo escucharon todos
— ¡Ya Kankuro! — le gritó — Los estás molestando…
— ¿Y si se fue porque lo dejé solo? ¿y si no tenía a nadie con quién hablar y por eso desapareció? — comenzó a preguntarse a sí misma
— Naruto no desapareció. — habló serio — Conocemos bien la aldea, podemos encontrarlo.
— Gaara… solo nos dieron dos días para quedarnos aquí y completar la misión.
