El Brindis (Cancelada)

¨después del brindis¨

¡POR IKKI¡

Exclamaron los cinco caballeros, y la diosa, mientras levantaban su copa al aire, dando un pequeño brindis.

—tengo la sensación de haber vivido una pesadilla— Reflexionó el caballero del fénix, dándole un sorbo a su bebida

—ya estas feliz shun— pregunta Pegaso, con una sonrisa pícara.

—sí y mucho, es el día más feliz de mi vida, al fin estamos juntos hermano— admitió Andrómeda, mientras se secaba con el antebrazo, unas lágrimas que se aproximaban en salir

—ya empieza otra vez, era de esperarse— comentó el dragón en forma de broma

–no llores shun los hombres no lloran

—no me malentiendas hermano, solo son lágrimas de alegría

—entiendo lo que sientes, pero deja de llorar

—ahh— Seiya da un suspiro pesado mientras, se recuesta en el sillón

—algo que me tranquilaza que ikki este de nuestro lado, no me gusta pelear con mis amigos— señaló con la mirada a ikki

—sí, me alegra que estemos juntos otra vez

—correcta señorita saori, a mí también me alegra— completo el dragón

Y así pasaron los caballeros charlando, y bromeando entre sí, casi toda la noche.

Por fin el reloj marcaba las once pm, era tarde y la mayoría de los chicos estaban un poco dormidos, ese día los tres caballeros planeaban quedarse a dormir en la mansión, con permiso de saori claro.

Pero uno de los caballeros no pensaba quedarse en la mansión.

—¿Hermano te quedaras en la mansión? — cuestionó el caballero de Andrómeda a su hermano

—Shun... los siento...no —respondió fríamente el caballero del fénix

—pero...

—Pero nada shun, NO ME GUSTA ESTAR EN GRUPO— expresó un poco enojado el fénix

—deja al amargado de tu hermano shun, es un necio—reclamo Pegaso

—bueno, ahh me voy a mi casa, nos vemos shun, hasta mañana

—adiós Seiya

—te despides de los chicos por mi shun?

—si Seiya no te preocupes

—esos dos ya están más allá que acá jajaajaja

—jaja tienes razón Seiya, están cansados, yo les digo— Pegaso se retira lentamente hacia la salida de la mansión, saliendo de esta.

—ikki, es tu decisión, solo quería que tú te quedaras un poco más de tiempo conmigo— escrito shun con un rastro de tristeza en sus palabras

—...

Shun se acercó a ikki, se levantó de puntillas y le dio un pequeño beso a ikki en la mejilla, acción que tomo desprevenido al fénix y que hizo que una corriente eléctrica corriera por todo el cuerpo.

—espero volvernos a ver ikki...hermano— se despide shun de su hermano con una voz angelical, el caballero se retira del lugar., dejando a su hermano estático con una mano en su mejilla y sin saber qué hacer.

El caballero de Andrómeda sube las escaleras llegando a su recámara al entrar cierra la puerta detrás de él, y rápidamente se quita la armadura, y se da una ducha.

Mientras se duchaba pensaba en ikki con un poco de tristeza, y si ¿no tenía donde vivir?, ¿a donde iría?, ¿Por qué no le gusta estar en grupo?, ¿acaso no quiere estar con él? — pequeñas lagrimas salieron de sus ojos esmeraldas, perdiéndose entre las gotas de agua, que lo purificaban, pensado en aquel hombre que lo intento matar, aquel hombre que lo salvo., aquel hombre de apariencia robusta, atlética, ....

Inmediatamente un recuerdo le llego a su cabeza, una sensación tan placentera, el recuerdo de ikki cargándolo para sacarlo de las llamas, el recuerdo de esos brazos fuertes protegiéndolo, ese recuerdo lo estaba trastornando al punto de excitarse, un calor le lleno el cuerpo y su intento de apaciguar el calor se sentó lentamente en el suelo de la ducha y empezó a recorrer su cuerpo con sus propias manos. Empezando por su cuello hasta su entrepierna, pensado en el moreno peli azul, seguía acariciándose todo el cuerpo de una forma sensual, con un leve sonrojo en su rostro.

Ignorando el hecho que estaba el grifo encendido, Haciendo que el agua templada cayera sobre él, haciendo más placentero el momento.

Gemía fuertemente el nombre de su hermano mayor, siguió así hasta que sintió que llegó al límite., cuando volvió en sí, no supo que hacer se sintió un depravado por haber hecho esas asquerosidades pensadas en su hermano, se puso la bata en la cintura. . . , Y salió del baño, Se recostó en su cama.

Se estaba quedando dormido pero el sonido de la puerta abriéndose lo despertó.

—¿Ikki?

—shun...— el fénix entra y cierra la puerta con seguro, este se queda parado en el marco de la puerta

—ikki yo pensé que tú ya te habías retirado

—no shun, tengo que arreglar algo que está pendiente— ikki se acercó a shun y lo abrazo, acto que tomo desprevenido al menor

—que estas...

—te pido por favor que me perdones

—Nissan tu no tienes...

—lo lamento shun, yo te intento asesinar 

—Nissan te entiendo tu friste mucho por mi culpa

—hermano no digas eso...

—...

— te amo

Ikki se abalanza sobre shun y lo besa eufóricamente, shun no se esperaba eso, sin embargo correspondió el beso, haciendo una guerra con sus lenguas., se separaron del beso por la falta de aire.

—Nissan

—no digas nada solo déjate llevar— shun asiente, ikki le arrebata la toalla dejando a shun totalmente desnudo

El caballero del fénix se levantó de la cama y se empieza a desvestir en frente del menor, a lo que el menor solo se sonroja.

Los dos caballeros se observan mutuamente, quieren decir algo, pero no lo dicen están nerviosos y lo saben.

hasta aquí el primer capitulo, espero que les este gustando bye