perdóname | caché

incubriendo la verdad

Me quedé anonadada. Estaba sorprendida y a la vez sentía un poco de alivio. Pero habían cosas que no entendía. Algo dentro de mi me decía que algo faltaba, que algo pasó para que confesara así como así. Algo o alguien..

Me quedé pensando en todo lo que había pasado. En la muerte de mi hermana, que había querido superar, obligándome a encontrar a alguien creyendo que pasaría mi dolor. Que Valentina volvería al atrapar al culpable. Pero no era así.

Valentina no estaba aquí conmigo.

Repasé la muerte de mi mejor amigo y que el caso todavía no estaba cerrado. Algo había. Algo tenían que estaban conectados. Algo tenían que no querían que siguiera investigando. Pero con sus amenazas y actos solo lograban una cosa:

Aumentar mi enojo.

Maria Jose no era una persona que olvidaba algo así como asi. Era rencorosa. Y tenía la capacidad de seguir con esto, por más que doliera y hubiera miedo.

Yo no iba a terminar el caso aquí. Puede que me amenacen, pero no me asustarían lo suficiente.

- ¿Poché? - alejo me abrazó por los hombros y yo recargué mi rostro en su pecho. - ¿Cómo te sientes?

- quiero gritar pero siento que no puedo. - lo miré a los ojos. - no sé que siento, la verdad. Esto es.. ¡muy confuso! No quería hablar y solo jugaba conmigo, ¿Pero de un momento a otro confiesa?

- puede que le haya entrado miedo... o, que hagan hecho que tenga miedo. - me separé un poco de el. - el anillo. Todavía tenemos el anillo. A ver, a ver, a ver. ¿tú piensas que le pagaron? - asentí. - osea que el no es el asesino de Jaramillo.

- o tal vez si... O tal vez, lo involucraron en esto... ¿Recuerdas que el anillo tenía un diseño? Al parecer era diseño de mujer, o eso habían dicho. Y a Jaramillo y Betancourt siempre los acompañaba una chica.

- ¿crees que ella esté detrás de los asesinatos?

- quizás no detrás. - suspiré, alejándome por completo de el. - pero algo tiene que ver con todo esto. Cuando revisamos las cámaras, Suárez hablaba con alguien por teléfono. Si tenemos acceso a el, podríamos ver con quién habló. - salté sobre alejo, dándole un fuerte abrazo. - a veces te quiero. - comenté aún aferrada a el.

- eres inteligente, pequeña.

- lo sé..

POV NARRADOR.

Unas calles lejos de allí, un hombre eufórico se encontraba persiguiendo una patrulla de policía a la vez que hablaba al teléfono.

Su enojo era tan grande que sus nudillos se llegaban a marcar por la fuerza sobre el manubrio.

- ¡Ese maldito es un bueno para nada! ¡Tenía un solo trabajo y no es capaz de hacerlo sin que le vean la cara!

Su velocidad en el auto aumentaba, acercándose más al auto que tenía fijamente en la mira.

- te dije que lo iban a descubrir. Ahora la cosa está en sacarlo antes de que abra la bocota. - una voz a través del teléfono de encontraba igual de molesta que su jefe. - ya no quiero seguir con esto, Sebastián. No quiero involucrarme y tener tantos problemas.