Cap LXXXVIII: Confesiones

1.6K 2 0
                                    

18 de agosto de 2022


-Oye, no te he preguntado cómo te fue con la Rachel – dice Pablo bebiendo un vaso de Pepsi sentado en el sillón del living de casa de Marcela.

-¿A qué te referí'?

-¿No te disculpaste con ella como te había aconsejado?

-Ah, eso. Sí, me fue bien, todo bien. Aceptó mis disculpas y me pidió que no me volviera a poner así con ella.

-Me alegro de eso. Oye, hubo otra cosa que no te pregunté. Yo te confesé que pienso en la Sofi mientras estoy teniendo sexo, tú me dijiste que también pensabai' en otra persona, ¿en quién?

-Júrame que no le se lo vai' a decir a nadie.

-Obvio, confía en mí. Pero tú también júrame que no le vai' a decir a nadie que yo pienso en la Sofi, y que tampoco le vai' a enviar el video donde salgo chupándotela a nadie, ni eso ni tampoco lo andí' contando, se supone que es algo entre nosotros.

-Ya oh, no necesitai' reiterármelo tantas veces. Ni que fuera tan cahuinera – dice Marcela. Pablo sonríe irónicamente.

-No voy a decir nada al respecto. Pero ya, dime po.

-Cuando estoy culeando contigo o con otro gil, no sé por qué... pero me imagino al Pipeta.

-¿De verdad? ¿Al Pipeta? Me esperaba a cualquiera menos a él, onda... si yo fuera mujer no creo que me atraería mucho, tiene un buen liderazgo político, por algo es presidente del centro de alumnos, pero además de eso no le veo otro atractivo, a menos que eso te sea más que suficiente – dice Pablo.

-Yo lo encuentro harto guachito rico, tiene bonito su pelo y con sus lentes se ve intelectual.

-Oye, yo también uso lentes.

-Pero tus lentes son terrible pernos po hueón, son grandes y con marcos negros.

-Son azules marinos, y los lentes del Pipeta también son grandes.

-Pero sin marcos, así se ven mejor. Deberíai' usar unos así.

-No, gracias. Me gustan mis lentes así.

-Ya oh. ¿Vamos? Ya es casi de noche, te voy a dejar al paradero.

-Oh, verdad. Qué lata que en inverno se oscurezca tan temprano.

¿Vai' a tomar la 101 en Las Rejas Sur? – pregunta Marcela.

-Sí, me bajo en 5 de abril y de ahí camino pa' mi casa – dice Pablo. Ambos salen de casa y emprenden su camino.

-Oye Pablo. Una pregunta, ¿haríai' un trío conmigo y la Javi? – pregunta Marcela. Pablo pone una cara extraña.

-Eehh... no sé. No lo creo.

-¿Por qué no?

-Jamás lo he hecho.

-Justamente por eso po. ¿No te tinca probar algo nuevo?

-La verdad no, en el sexo me gusta entregar mi cien por ciento a alguien, no repartirlo cincuenta y cincuenta.

-Pero hueón, si es por matemáticas, el cincuenta por ciento que no estai' dando lo da la otra persona, así todos quedan felices.

-No sé Marce, no creo que lo haga, nunca lo he hecho.

-No es un argumento válido, antes que culearai' por primera vez con la Rachel jamás lo habíai' hecho, y ahora mira, descubriste lo rico que es. Con los tríos es igual, no seai' tan monogámico, también es rico compartir.

-La Rachel no fue mi primera vez.

-¿No? ¿Entonces quién?

-Fue con la Javi, pal Halloween del 2019.

-Chucha, fue hace tiempo igual, íbamos en octavo básico. Entonces ¿solo culeaste con ella antes de la Rachel? ¿O hubo alguien más?

-Sí, la Patty.

-¿La Patty? ¡Pero hueón! Soy tu amiga de confianza y me teníai' estos secretos bien guardados eh.

-Erí' la mejor amiga de la Rachel, ¿cómo te iba a contar eso? Como ya terminé con ella ahora me da lo mismo.

-¿Y con la Patty cuándo fue?

-En las vacaciones de invierno del año pasado, solo lo sabe el Fausto.

-¿Quién le contó? No creo que hayai' sido tú mismo.

-No, la Patty le dijo en una discusión que tuvieron, me dio rabia igual, se notó que le dijo solo pa' sacarle celos.

-Chuta, qué cuático todo. No sabía que teníai' historial antes de la Rachel. Oye, si erí' capaz de culear con amigas de más erí' capaz de culear con dos al mismo tiempo – dice Marcela.

-¿Enserio vai' a insistir con lo del trío? Tú dai' por hecho que la Javi quiere, tendríai' que ver si ella quiere antes de querer convencerme a mí.

-La Javi querrá, no tengo certezas, pero tampoco dudas.

-Dai' por hecho muchas cosas sin certezas, ¿ahora erí' presagiadora o qué? – pregunta Pablo con gracia.

-Simplemente prefiero ser optimista, cuando me propongo lograr algo lo hago. ¿Te acordai' del carrete en la casa de la tía del Hugo en La Reina?

-Obvio, fue el verano pasado, lo pasamos súper bien en la piscina.

-Ya po, ahí me propuse culearme al Hugo, y lo hice, algo borracha, pero lo hice – dice Marcela.

-Jajaja, oh, deveras. Diste cualquier jugo, tomaste caleta de cerveza y después andabai' nadando borracha en la piscina.

-Jajaja, sí. Andaba terrible loca, tanto que me meé en la piscina.

-Es broma, ¿verdad?

-No, enserio me meé jaja.

-Marce, enserio te pasai' pa' ser cerda. Cuando ya habíai' salido de la piscina yo me metí con el Fausto y el Hugo, y los tres nos pusimos a absorber el agua y a escupirla simulando ser piletas, con razón el agua estaba más tibia. ¡Qué asco por la cresta! – dice Pablo con desagrado, a Marcela le da un ataque de risa.

-Jajaja, bueno. Harto pendejo lo que hicieron también, tan culpa mía no es – dice Marcela. Ambos llegan al paradero – pucha, la conversación está buenísima, pero ya llegamos al paradero. Te apaño hasta que pase la micro.

-Tranqui Marce, no te preocupí'. Anda a tu casa a ordenar tu habitación, yo voy a estar bien.

-Ya po, la pasé súper bien contigo hoy.

-Yo también – Pablo abraza a Marcela, posteriormente se separa de ella de a poco y le da un beso apasionado – Marce, erí' una reina en la cama, que se repita – le dice Pablo susurradamente al oído a Marcela, posteriormente le da tres piquitos en los labios.

-Te quedó gustando eh. Ya po, cuando querai'.


***

Sexo sin ControlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora