Mi Primer Amor [SesshInu | Yaoi ]

Promesa de un Reencuentro (One-shot)

Oigo el despertador sonando, me remuevo un poco de la cama y sacó la cabeza de las sabanas, para darme cuenta que son las seis y siete. Me levanto con pesadez y camino hacia mi calendario que queda pegado en la puerta de mi habitación.

—"1/06/15"—

Hace tres años exactamente, que no te veo, amor mío. Todavía recuerdo tus besos, tus caricias gentiles – extrañas para mí. Pues siempre eres serio – Odio haber tenido que mudarme junto a mis padres, pero...

¿Qué podía hacer un chico de doce años en ese entonces?     

¿la respuesta?

Nada.

Una reprimenda por parte de ellos. Es lo que ganaría.

Ya sabía que era malo que un chico de doce años, saliera con un chico que en ese entonces tenía 17, casi por cumplir 18. Pero me arriesgue, me enamoré como lo loco de ti.

Cuando me mudé con mis padres a Japón, mi carácter cambió, ya no era el niño alegre que solía ser, ya no era el niño bromista de antes, ya no era el chico "emociones abiertas" que conociste. Mis padres lo notaron y se preocuparon, no quería hacerlo y tuve que forzarme a sonreír ante ellos. Aun lo hago y se me hace cansado el mentirles.

Pues simplemente al separarme de tí, no me gustó y sentí que mi corazón se partió, todas las noches me siento en mi ventana preguntándome:

"¿Dónde estarás? ¿Serás feliz o no? ¿Me recordaras? O acaso ¿Ya encontraste a alguien más? ¿Alguien más que no soy yo, ocupo el lugar que ocupé en tu corazón cuando estábamos juntos? O ¿Todavía me tienes ahí?"

Porque yo sí.

Me aferro a ese último pensamiento y sonrió ampliamente, una sonrisa boba, según mis amigas de este lugar.

Pude disfrutar de ti. Pero mi cuerpo, aun pide más.

Más caricias.

Más besos.

 Más ternura.

Más "amor".

Más de tu cuerpo.

 Quiero volver a ver tus ojos fríos e intimidantes para los demás, pero para mí, dulces y cariñosos.

Tu suave piel a mi toque.

Y tus lindas y únicas sonrisas.

Me despedí de ti, de la manera más placentera para mí. Ojalá te hubiera dicho donde me mudé, pero ni yo lo sabía, porque mis padres no me dijeron cuando pasó nuestro separamiento, del que nadie nunca supo, al ser nuestra relación secreta.

Los únicos recuerdos tuyos que conservo es el collar de un medio corazón con un ala dorada en la derecha, pues el otro lado lo tienes – o tenías. – tú. Y un brazalete del mismo diseño, que me pongo en la muñeca derecha.

Primero de Junio y es Lunes.

Por suerte mañana no hay lecciones, los profesores tienen reunión para ver de dónde contratar un profesor o profesora de informática (Computación)

Suspiro cansado y suelto el pilot, que cae golpeando la puerta tres veces ante el movimiento.

Agarro mi toalla y me meto al baño, me quito la ropa y la echo al cesto, la pulsera también, esta le pongo encima del lavabo de manos y el collar, que no se me olvide.

 Abro la regadera y sonrío cerrando los ojos. Tres años. Tres años. Tres. Todavía puedo sentir tus caricias en mi cuerpo, cada que, el agua cae sobre este.