MY GAY LIFE

Capítulo 3. Hora Del Plan.

¡No se me ocurre nada! Dije fastidiado. Necesitaba pensar un plan para estar seguro de que Sebastián era Gay.

Pasaron 4 horas y seguía sin tener idea de que hacer, mi Playlist de Ariana Grande sonaba a su máximo volumen, puse pausa y decidí llamar a Ana para que me diera una idea.

-¿Ana?
-¿Mi zorra favorita?
Solté una carcajada.
-¿Qué estás haciendo?
-Estaba haciendo tarea ¿y tu?
-escucho música e ideo un plan para saber si Sebastián es Gay. ¿podrías ayudarme?
-¿Qué no se supone que los Gays tienen un radar para identificar a otros Gays?
-Claro que sí boba, pero en este caso mi radar no funciona. ¡Ayúdame!
-Ya lo tengo, puedes ponerle algunas cartas en su casillero y que sepa que es un hombre quien se las envía, y si las conserva es Gay y si las rompe o quema es heterosexual.
-Eres una genio. ¡Te amo! Nos vemos mañana en el colegio, besos.
Colgué, tome Lápiz y papel y comencé a escribir una carta al amor de mi vida

Sebastián:

¿Alguna vez te has preguntado que tan bien luces al sol? O ¿por que tus botas siempre lucen brillantes? Esas son algunas de las pequeñas cosas que me encantan de ti, y otras más como tu sonrisa y tus hermosos labios, la forma que la que tus orejas se mueven cuando hablas, tu voz, ¿Te han dicho que cantas delicioso? Tengo una canción tuya y no puedo dejar de escucharla, adoro tu sencillez y tu forma de caminar, la forma en la que mueves tus manos al hablar, me encanta tu firma y tu cabello, cosas que difícilmente puedo explicar, Amo tu forma de pensar y por supuesto de actuar, me vuelves loco y me haces suspirar. Quisiera estar contigo el resto de mi vida, puede sonar un poco loco, en realidad no creo que te importe cuando te diga que soy un chico, y si no quieres saber nada de esto no importa solo quería decirte lo que siento.

Atentamente: Un chico al que le encantas.

Y ya tenía lista mi carta para Sebastián, tenía que esperar hasta mañana para dejarla en su casillero y saber su reacción, esta es la prueba de fuego.

A la mañana siguiente llegué al colegio y fui directo a dejar la carta en el casillero de Sebastián. Llegue a mi objetivo y metí la carta en los espacios abiertos y me fui directo a clases tratando de que nadie me viera, Sebastián estaba en la misma clase que yo así que leería la carta en clases.

Me acomode en mi asiento cuando llego Sebastián y se sentó al lado mio, me miró y me hablo
-Hola.
-Hola, sonreí.
-¿Cómo seguiste del golpe? Dijo apenado
-Mejor, solo sangre todo el día y me dolió la cabeza, (sonreí)
-Enserio lo siento mucho. (Dijo apenado)
-No es en serio, estoy bromeando (comencé a reír).
-Oye, enserio me la creí (dijo sonriendo)
El profesor llego y comenzó a dar su clase, Sebastián no dejaba de mirarme ¿será que ya leyó la carta y se dio cuenta que soy yo? Me sentía muy nervioso.

Termino la clase y Sebastián se acercó a mí
-¿Qué harás el sábado? Pregunto curioso
-¿Me estas invitando a salir? Dije sonriendo
-Mmm digamos que si, (dijo sensual)
(Mis piernas temblaron) - Estaré libre el sábado.
-¿te gustaría ir al cine? (Cada vez se acercaba más a mi)
-P-porsupuesto (estaba a punto de morir)
-Entonces es una cita, paso por ti a las ocho. Me guiño el ojo y se fue.

¡WOOOOW! ¿QUÉ DEMONIOS ACABA DE PASAR? El chico más caliente de la escuela me invitó a salir, tengo que contárselo a Ana.