𝕻𝖊𝖑𝖎𝖌𝖗𝖔 (lunay-Jefnier Osorio )

Cap 24

Bueno, de acuerdo. He captado el mensaje. Voy a tener que asumirlo. En realidad, no me queda de otra.

—Jefnier: "¿Entonces? ¿Aceptas?"—

Me contento con mirarle, intentando adivinar lo que está pensando. Mi mente carbura a cien por hora.

La carrera es dentro de cuatro días y eso es mucho tiempo. Sobre todo porque solo le han dado a Jason hasta el final de la semana para reembolsarles.

No entiendo por qué no me propone otra cosa. Como participar en la carrera, por ejemplo! Primero, estoy segura de que está mejor pagado. Segundo, ¡es más elogioso que hacer de zorra en la línea de salida!

Empiezo a preguntarme si no se estará riendo de mí tomándome por una de esas furcias a las que puede manipular como le da la gana.

—Jefnier: "¿jessica?"—

Pestañeo y asiento con la cabeza como una autómata. Creo que acabo de aceptar sin querer.

—Jefnier: "¡Pues bueno, perfecto! ¡Estamos en la misma onda! Me gusta cuando estás cooperativa."—

Cuando termina esta última frase, con un gesto travieso en los labios, tengo un declic. Está confirmado. ¡Me está tomando por una tonta del culo! Tengo que pasar al plan B, y rápido. ¡A mí no me engaña!

Y que le den a mi consciencia y a mis buenas resoluciones, ¡solo se me ocurre una cosa que puedo hacer! ¡Me da igual lo que pueda pasar, tengo que intentarlo de nuevo!
Pero eso no quiere decir que llegue hasta el final. Lo justo para desestabilizarle. ¡Tengo dignidad!
Una vez que tenga lo que quiero, salgo corriendo sin despedirme y, cuando quiera entender lo que está pasando, ya será demasiado tarde.

Si se cree que voy a aceptar ese trabajo sin intentar nada más, ¡está delirando completamente!

Me pongo directamente manos a la obra y me acerco a Jefnier para hacerle una pregunta.

—Jessica: "Y a cambio de tu inestimable ayuda, ¿qué te debo?"—

—Jefnier: "Tú, sé agradable y sonriente. Eso debería bastar."—

—Jessica: "¿Amable y sonriente? ¡Vamos, como siempre!"—

—Jefnier: "¡sí, mas bien al contrario!"—

—Jessica:"Venga, para. ¡Sé que te gusta!"—

Le hago una mirada traviesa. Jefnier levanta una ceja y me sonrie brevemente, sin decir nada. Decido pasar a las cosas serias y me pongo a seducirle.

—Jessica: "Tal vez podría enseñarte..."—

—Jefnier: "Dale... Estoy impaciente por ver cómo lo haces..."—

—Jessica: "¿Podríamos ir a un lugar más... tranquilo?"—

Jefnier me dedica una sonrisa vanidosa antes de llevarme al piso de arriba. Penetramos en una habitación espaciosa con una decoración
bastante elegante.

Me fijo enseguida en dos sillones que hay alrededor de una mesita baja, en frente de una cama king size que preside la pieza. ¿Será esta su habitación?

Mi determinación se afloja un breve instante antes de recuperarse. Todo va como previsto...

Tomo las riendas y no pierdo tiempo, le cojo las manos a Jefnier para obligarle a mirarme de cara. Él se deja hacer, sin abandonar ni un solo momento su mirada maliciosa.

Le suelto y acaricio sensualmente la curva de mis pechos mientras le miro fijamente a los ojos. Un brillo le atraviesa los ojos.

—Jessica: "¿Te pongo caliente?"—

—Jefnier: "Sí, no está mal, pero puedes hacerlo mejor.."—

Me acerco a él y pongo mis manos en su torso antes de empujarle hacia el sillón. Divertido, Jefnier se deja llevar y aprovecha para darse un homenaje
mirando mi escotazo.

Me acerco aún más a él y pongo las manos en sus hombros para obligarle a sentarse, lo que hace dócilmente.

—Jefnier: "Mmm... Interesante... Me gustan las mujeres que tienen iniciativa. Creo que has entendido de qué va esto. Estás hecha para este trabajo."—

—Jessica: "Espera y verás..."—

Me come con la mirada. Me abraza por la cintura y me pega a él.

—Jefnier: "Estoy deseando verlo, ma."—

Le animo poniendo mis manos sobre las suyas.

—Jessica: "Entonces, prepárate, señorito, porque te vas a poner las botas..."—

Agarro su chaqueta por los bordes para quitársela, al igual que su camisa, y lo pongo todo con cuidado en el sillón que hay al lado.

Mi vista se fija en su piel, justo por encima de su corazón. Tiene dibujado un tatuaje imponente. "Bella Muerte."

—Jessica: "Bella Muerte..."—

—Jefnier: "Ven aquí, ¿qué estás mirando?"—

Me agarra con las manos y me da un beso deliciosamente seductor. Me dejo llevar besando su boca, entusiasmada de repente por este placer inesperado.

Jefnier me acaricia con las manos, electrizándome de arriba abajo. ¡No imaginaba que reaccionaría tan intensamente a sus caricias!

Sus grandes manos se posan en mis caderas y levantan mi camiseta descubriendo mi abdomen. Se aparta de mí, y su mirada henchida de deseo quema mi piel allá por donde pasa.

—Jefnier: "¡Para comérsela!"—

—Jessica: "¿Te gusta lo que estás viendo?"—