Mi Única Fantasía

Capitulo 24: "Si la tocan, haré que el mundo entero sufra"

La mitad de la mansión está destruida, con los escombros esparcidos alrededor así como también los cuerpos malheridos de los guardias y empleados, contando con algunas bajas.

Hay un grupo de guardias, entre los que se recuperan rápido y los que no estaban a la hora del ataque, todos ellos están espectantes y ansiosos a la decisión, a la orden de la persona frente a él.

Con un semblante frío y una mirada ensombrecida por este cuadro, con la mandíbula tensa y una expresión que claramente es de enojo, Luca ha estado así desde que le notificaron sobre el ataque.

De fondo, escucha que Renzo maldice y cuando lleva su mirada hacia él lo ve caminar de regreso a ellos, luego de haber estado en la cabaña, la cual a simple vista parece intacta.

- ¡Esas escorias, se las llevaron!— Anuncia Renzo hacia su hermano.

Es difícil para sus hombres, leer sin dificultad la cara de Luca ya que siempre frente a ellos, solo existe una, sombría y sería. Ni siquiera saben que es lo que tanto observa, de un lugar que está destruido y dónde ya no hay mucho que rescatar.

Antoni, se acerca a él con las manos juntas sobre la parte baja de la espalda y de postura recta, tal cual a un militar.
— Jefe, debemos llevarlo a otro lugar— Dice, con un tono de voz inquebrantable, tan frío y rudo como los hermanos Denaro.  Él es uno de sus guardias de confianza, es más, él está a cargo de todos los demás hombres que trabajan para la organización.

Luca, sin mirarlo y sin decir nada, saca su arma de fuego. Camina decidido hacia a un hombre que está en el suelo, posiblemente inconsciente pero que no lleva el uniforme de sus hombres, el característico traje negro con la insignia de la organizacion en la chaqueta.

Renzo y todos sus hombres siguen sus pasos, sin saber que hará hasta que de repente, le saca el seguro al arma y le da un disparo al hombre que está en el suelo, en el pie.

Al instante que la bala hace contacto con el sujeto, este se levanta del suelo sentadose y gritando de dolor al comprobar el disparo.
Aunque ni siquiera tiene  cinco segundos en lamentarse ya que siente el frío contacto con el arma de Luca en el medio de la frente.

Luca, inexpresivo, lo mira directamente a los ojos.
— Colgaré tu cabeza en la puerta de la maldita mansión de tu jefe— Escupe Luca, — De todas formas estás muerto pero puedes tener una muerte menos dolorosa si me dices lo que quiero saber.

— Jamás colaboraré contigo....

— Ruso- Salta Renzo, con una fría sonrisa.
— Basura— Ruge, ya que reconocen a la perfección ese acento.

— Perdiste...— ríe el hombre ante la presencia de Luca, — Tu fortaleza fue derribada y tu chica será violada por todos...— en ese momento se escucha otro disparo, siguiendo con el otro pie y antes de que diga algo más, Luca lo toma del cuello y a duras penas lo obliga a ponerse de pie con su dolorosa ayuda.

— ¿Yo perdí?– Luca, aún lo sostiene del cuello haciendo que sus pies esten a centímetros del suelo. — Tu asquerosa organización firmó su sentencia de muerte al entrar aquí— el hombre ya está perdiendo el conocimiento pero antes de que eso suceda, Luca lo tira al suelo.

- ¡Pu...drete!— Escupe el hombre tratando de recuperar la respiración.

Luca, levanta la mirada hacia sus hombres,
— Son los rusos— Afirma, — Ya saben dónde ir.

— Sus clubes nocturnos— sigue Renzo, — entremos allí, hagamos desastre— ordena, con un fría expresión.

— ¡Hagan lo que tengan que hacer pero las quiero de nuestro lado antes del amanecer!— Ruge Luca, dejando aún más en evidencia su enojo por esta situación.