" 𝑅𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜 𝑡𝑜𝑑𝑜 𝑒𝑠 𝑚𝑎𝑡𝑒𝑟𝑖𝑎𝑟𝑙. 𝑇𝑎𝑙 𝑣𝑒𝑧 𝑛𝑜 𝑡𝑒 𝑙𝑙𝑒𝑛𝑒 𝑑𝑒 𝑓𝑙𝑜𝑟𝑒𝑠 𝑠𝑖𝑒𝑚𝑝𝑟𝑒, 𝑝𝑒𝑟𝑜 𝑡𝑒 𝑞𝑢𝑒𝑟𝑟𝑒 𝑦 𝑚𝑖𝑚𝑎𝑟𝑒 𝑐𝑜𝑛 𝑏𝑒𝑠𝑜𝑠 𝑦 𝑎𝑏𝑟𝑎𝑧𝑜𝑠 𝑒𝑠𝑒 𝑐𝑜𝑟𝑎𝑧𝑜𝑛 𝑟𝑜𝑡𝑜 ℎ𝑎𝑠𝑡𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑠𝑎𝑛𝑒."
Regresaría el tiempo atrás solo para poder arreglar las cosas, para poder decirle un te quiero nuevamente y arrepentirse de dejar sus brazos cuando más lo necesito. Siempre estuvo presente en las buenas y en las malas pero está vez no fue así.
Su mente y su cuerpo ya no existían en este lugar, fue una bomba lo que lo hizo estallar en mil pedazos. No sabía que hacer en esos momentos ahora, tenía ese resentimiento dentro de su corazón el no poder gritarle a la cara que lo sentía. Aunque no fue su culpa.
Nada de esto lo era en realidad. Pero se culpo como si hubiera cometido esos crímenes. Nadie podía entender su sufrimiento, era como no poder hablar de lo que sentía porque sería menospreciado o olvidado en el tiempo. Le ardía el corazón de saber que Volkov pensara que realmente le pegó y lo tachará de ahora en adelante como un hijo de puta.
" No fue tú culpa."
Por la mañana pensó en como solucionar este conflicto e incluso tuvo la idea de ir al FBI a buscarlo aunque perdería su ego y dignidad en ello. No tenía nada más que perder así que fue en busca de ese perdón.
Horacio lo buscó por la sede federal, temiendo que Volkov se haya tomado el día, veía pasar a los patrullas y nadie era un ruso pasando por su lado. Matvey había ido al trabajo pues debía horas en el hospital así que tenía que ir si o si dejando a solas al moreno que no tardó en escapar de sus problemas.
La tarde iba cayendo y él seguía sentado al frente del garaje de la sede sin éxito alguno. Tomó su móvil buscando entre su galería alguna imagen de él.
Había guardado algunas pero, era doloroso recordar esos viejos tiempos. Era doloroso sacar ese tema de conversación, decir que "fueron" y ya no son lo hacía temblar a costa de todo lo que vivieron y se prometieron. El amor era difícil, pero por el amor no se moría uno... ¿O si?
— ¿Uve? —
«¿Qué coño quieres?» hubo un suspiro de miedo a través del altavoz del menor.
— Uve... ¿Puedo hablar contigo? Quería... Disculparme- Yo.. —lo interrumpió.
«Horacio no estoy para tus tonterías. No me vuelvas a hablar ¿De acuerdo? Y no te acerques nunca a Natasha» Colgó.
Saltaron lagrimas por su mejillas estando petrificado por lo que oyó y como es que Volkov le hablo. ¿Por qué le hacía esto? Sabía que era un chico sensible y que heriría sus sentimientos. Sollozo cubriendo su rostro pues estaba avergonzado de volver a sentir algo por él cuando ya no había nada.
Necesitaba que todo a su alrededor parará, sentía asfixiarse y no sabía que hacer. Quería matar a esa parte de él que insistia en esperarlo, pero en el fondo sabía que no podía entrar a su corazón y aun así lo intento sabiendo que lo perdería todo. Y ahí esta, perdiendolo todo, llorando desamparado en una calle oscura.
Era difícil olvidar a alguien con el que había imaginado pasar el resto de su vida. Le dolía el pecho, el alma entera, el pensar simplemente que pudo haber algo, sentirse solo, sentirse sin amor, perdido en un pozo oscuro con frío y miedo.
Quizás no merecía cosas bonitas porque estaba pagando por pecados que no recordaba. Pero dolía y no merecía esos tratos. Salió corriendo de ahí queriendo desaparecer de la vida, de esa realidad tan jodida que lo estaba matando lentamente.
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Cartas con olor amor ♡︎𝑽𝒐𝒍𝒌𝒂𝒄𝒊𝒐 ♡︎
Lãng mạnCariño, hablame de amor. Abrazame y apriétame, hazme sentir como si tú solo existieras en mi vida. Querido mío, cuentame todos tus pecados y males que yo los pagaré contigo. Pequeño, no me importará descoser mi corazón y hacerlo trizas para que tú...