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"Cuando mis ojos se desenfocan..."

Ser independiente es más difícil de lo que suena

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Ser independiente es más difícil de lo que suena. Una vez dependes de alguien con todo tu corazón y alma, separarte prácticamente no es una opción.

Es una idea desagradable y enfermiza.

Le daba asco ese lado de él.

Thoma realmente no quería terminar dándole su corazón a la persona equivocada.

(...)

- ¡Bien, éste día se trata de mi! - dijo tras finalmente soltar su escoba. Tenía que hacer las labores de la hacienda antes de cualquier otra cosa, era obvio.

Caminando alrededor del jardín pensaba en alguna idea en la cual invertir su tiempo. ¿Ir de compras? ¿Dar un paseo por Inazuma? ¿Visitar a Yae Miko? ¿Ir a ver a los perros del centro? Eran buenas ideas, pero todo eso ya lo hacía seguido... Necesitaba algo nuevo. Algo que lo distrajera de todo esto. Tampoco era como si quisiera molestar a Ayaka con preguntas sobre un tema así de trivial.

Entonces el qué...

Su semana ya se había animado gracias a la visita del viajero y a su cumpleaños que sucedió hace pocos días.

¿Qué más podría hacer?

Hmm... Hace mucho tiempo que no bordaba nada. Quizás esa sería una buena idea.

Fue a buscar los materiales que necesitaba: distintos tipos y colores de telas, aguja e hilo, y algunos botones y cintas, y algodón.

Ahora solo faltaba la idea de qué hacer. ¿Ropa? No, ya tenía bastante de eso. ¿Decoración? No, la casa estaba cubierta de ella. ¿Un regalo? No tendría sentido, no había una ocasión, y ya había dado regalos hace poco.

¡!

Un pensamiento surgió por su cabeza: un muñeco.

Y como este día se trataba de él, lo haría de él.

Un lindo muñeco de Thoma. Si, esa idea estaba bien. Sin darle más vueltas, comenzó a coser las telas y rellenar partes con el algodón. Estaba siendo precíso y sin querer arruinar cualquier parte, ni que quedara mal. Unas... Dos horas pasaron, y ya casi terminaba. Solo quedaba terminar de coserle la boca y estaba listo.

Listo. Sonrió con el resultado de su trabajo. Llendo a su habitación, colocó el muñeco en una de las repisas y salió de aquel lugar, regresando al jardín. Recogió todos los materiales que usó, guardándolos en sus respectivos lugares. Se estiró con un suspiro, preguntándose qué hacer ahora.

Optó por ir a uno de los restaurantes que habían en la isla y comer lo que sea que le pareciera apetecible en ese momento.

- Tengo ganas de comer dango... - cerró sus ojos mientras caminaba. Conocía el lugar, y no había mucha gente afuera a esta hora. Nada malo pasaría.

𖣘°๖ۣۜSo close but so far༻࿌𖣘 - «Thomato»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora