Amar, perder, is the same shit

Si alguien me hubiera dicho que amar me destrozaría cada milímetro del corazón, si alguien me hubiera advertido que mirarte a los ojos era sinónimo de enamoramiento inmediato, si alguien se hubiese dignado a decirme que tu sonrisa era un arma tan letal, que ningún ser mortal puede ser inmune a lo que puede llegar a generar. Ojalá alguien me hubiera advertido, que era mejor tenerte de lejos pues el movimiento de tu cintura era la escalera hacia el cielo, y hablando de ello, también podrían haberme advertido que hacerte el amor sería como volar hacia venus, donde conocería las miles y un galaxia y haría malabares con dos planetas hasta volverlas tan roja como marte, sería tan placentero que ir hacia el infierno con el propósito de conocer el sabor de tu río natural, no sería una mala idea. En efecto, si alguien me hubiese dicho algo así, definitivamente yo hubiera caído igual pues ¿A quién quiero engañar?, fue un placer que una persona como tú, me haya roto el corazón.

Viernes, 24 de agosto del 2018

"Es el turno de hablar de la joven estrella de 15 años, Camila Cabello, dicen que es una joya y una promesa para las futuras olimpiadas. Recordemos que Camila Cabello es hija de la patinadora artística de hielo, dos veces medalla de plata y una de bronce, Sinuhe Estrabao, Siento que ella puede dar bastante Chanel, ¿tú qué dices?"

"Que ¿qué digo?, ella es fantástica, has visto las vueltas que da, madre mía, pareciera que ella no tiene sentido de peligro. Ella sabe dónde está parada y que definitivamente nació para esto. Su competencia más cercana es Britanny Wilkenson y le saca ventaja por 2.9 puntos. Déjame decirte que este torneo que viene en cuatro meses será el punto perfecto donde Camila Cabello será reconocida a nivel mundial y estará en boca de las grandes televisoras deportivas"

"Espera Chanel, allí viene"

Los comentaristas silenciaron sus micrófonos dejando que el público aplaudiera a Camila. Su mano estaba ocupada sosteniendo un ramo de rosas y sin más se dispuso a saludar dando vueltas por la pista de hielo con una amplia sonrisa. Ella había ganado su último trofeo en el área pre adolescente y ya para su siguiente competición, era contra chicos de más edad, más experiencia y aquello simplemente la llenaba de emoción.

El corazón de Camila aumentaba su frecuencia cardíaca al sentir la brisa helada que el hielo desprendía. Aquella adrenalina no podía compararla con absolutamente nada, nada que ella conociera, era como su dopamina personal, su motivo de alegría y sus ganas de vivir. Su sueño estaba prescrito en las estrellas de ser la mejor patinadora del mundo y darle a su mamá la medalla de oro que ella nunca consiguió; con esa mentalidad ella desarrolló su destreza, con dedicación y por supuesto bajo las enseñanzas de su madre y de su entrenadora. April Montenegro, ex campeona internacional y dos veces medalla de Oro en las olimpiadas

-¡ESA ES MI HIJA!- Alejandro Cabello gritó emocionado al ver a su hija salir de la pista con los ojos llenos de lágrimas, ver a sus padres sentirse tan orgullosos de ella era su mejor trofeo. Su padre la ayudó a colocarse la funda para las cuchillas de sus patines de esa manera poder estabilizarse y caminar.

-Alejandro, ¡que me la vas a avergonzar!- Regañó Sinuhe acercándose a su hija para abrazarla fuertemente y darle besos por toda la cara -¡MI PRINCESA PRECIOSA!- Beso en la mejilla izquierda ¡COSITA DE MAMÁ!-Beso en la mejilla derecha -¡AMORCITO DE MI VIDA!-beso en la frente- ¡BEBECITA DE LA CASA!, DIOS TE BENDIGA MI HIJITA - Sinuhe la apretó más aún contra su cuerpo apachurrándola por completo

-Y después dice que soy yo- Se quejó Alejandro entre risas.

Camila miró risueña a sus padres, ella lejos de avergonzarse, le hacía sentir amada, muy amada.

-Va, va, que ya necesito descansar- La de ojos marrones se rió mientras caminaba con cuidado en el acolchado del piso con dirección a las bancas que estaba cerca de ella.