☆◦ ─ ───────── ─ ◦☆ ⋆
Seis años después, Sakura y Yuzuha seguían juntas a pesar de las adversidades.
Aunque no estaban casadas, en marzo del 2015 en Shibuya se inició el proceso de emisión de certificados conyugales especiales para parejas del mismo sexo que son, en cierto modo, equivalentes a un matrimonio. No estaba de más decir que ellas fueron de las primeras en tramitar uno de esos.
Rato después de hacer el trámite llegaron al apartamento que habían alquilado un año y medio antes cuando Sakura consiguió un trabajo formal en una empresa como arquitecta. Antes habían estado viviendo en el antiguo apartamento que pagaba Taiju, el hermano mayor de Yuzuha, pero en ese momento ella estaba a punto de graduarse de la universidad y no querían seguir importunando. Bueno, en realidad a él no le molestaba pagarlo y se los dijo varias veces, solo que ambas eran un poco orgullosas.
Ese apartamento además era mucho más grande que el de unas universitarias, donde tenían una habitación perfecta para ambas, una de invitados, cocina, comedor y una sala de estar. Estaba cerca del trabajo de Sakura (en donde no le iba nada mal) y a las afueras de Sendai, por lo que no se separaron de su barrio de origen. Considerando también que Yuzuha era la manager de Hakkai, cuya carrera de modelo ascendía demasiado rápido y ya era reconocido en todo Japón, ahí podría trasladarse fácilmente.
Ciertamente era difícil para ambas cuando Sakura debía estar horas en la oficina e incluso quedarse ahí para terminar proyectos, y cuando Yuzuha debía irse de viaje varios días con Hakkai. Pero lo habían hecho funcionar porque se querían y estaban dispuestas a seguir intentándolo.
—Entonces, ¿es como si oficialmente fuéramos esposas? —le preguntó con una risita emocionada Sakura cuando les llegó el trámite que pidieron. Yuzuha lo seguía admirando con detenimiento y no respondió por varios segundos.
—Lo somos.
Sus palabras, tan firmes y serias, hicieron que el corazón de Sakura diera un vuelco y sonriera como tonta. Instintivamente la abrazó por la cintura y pegó su rostro a su brazo sin soltarla, al contrario, haciéndolo con mucha fuerza. Escuchó como Yuzuha soltaba un pequeño jadeo al no esperarlo porque estaba concentrada en los papeles, así que después los soltó, dejándolos en la mesa, y se giró con cuidado para quedar a la par de Sakura y mirarse a los ojos fijamente.
—Te amo.
—Te amo más —murmuró Sakura acercándose a sus labios lentamente. Sonrió antes de acercarse a besarla y Yuzuha le correspondió al instante.
Sakura nunca se cansaba de besarla. Era como si se pudiera teletransportar a otro lugar hermoso diferente de la tierra en donde podían ser ellas mismas, estar juntas sin importar nada y amarse eternamente. Aunque no podían negar que a veces era difícil hacerlo en público, teniendo que soportar las malas miradas, palabras dolorosas e incluso acciones groseras, pero poco a poco habían aprendido a valorar lo que tenía sin tomar importancia a su alrededor. No siempre funcionaba pero hacían su mayor intento.
Al separarse juntaron sus frentes y se quedaron viendo mutuamente. Sakura tampoco se cansaría de mirar hacia sus bellos ojos así que esbozó una sonrisa y comenzó a acariciar sus mejillas con delicadeza. Yuzuha se quedó quieta contemplando a su esposa dulcemente.
Estaban seguras que estarían juntas todas la vida ya que no había poder humano que las separará o les hiciera dudar de su amor, ni siquiera la humanidad que aún no estaba lista para aceptar a dos personas que se aman. Sí, tal vez no eran el estándar como todos esperaron de ellas, pero se andaban y teniendo mínimo a una persona que las apoyara sabían que podrían comerse al mundo entero si así lo deseaban.
Tal vez las historias de amor sí tenían finales felices.
ESTÁS LEYENDO
midnight love ❍ shiba yuzuha
Fiksi Penggemar· ─ ❨ 𝗺𝗶𝗱𝗻𝗶𝗴𝗵𝘁 𝗹𝗼𝘃𝗲 ❩ no puedo ser tu amor de media noche cuando tu plata es mi oro Sakura Yoshioka lo supo. Supo que su destino había sido encontrarse con Yuzuha Shiba en aquel campamento de verano a media noche jun...