¿Dónde estaba Naruto?
La guerra había terminado, pero ¿dónde estaba Naruto?
No lo encontrarías ayudando a los heridos, y no lo encontrarías siendo un hombro en el que pudieran llorar aquellos que lo habían perdido todo.
Pero, ¿dónde estaba Naruto?
No lo encontrarías en la tumba de sus padres, pero tal vez habría algunas flores allí, siempre tan vibrantes y anaranjadas.
No lo encontrarías en la tumba de su Sensei, que después de tanto dolor y prueba por fin se reuniría con sus seres queridos, en un lugar tan lejos de aquí pero tan cerca. El espantapájaros había pasado toda su vida de luto, se merecía el fin de su miseria.
No lo encontrarías celebrando con sus amigos, que esperaron sólo unas horas a que apareciera. Sus amigos que sabrían muy bien donde estaba exactamente Naruto, pero siempre fingirían ignorancia.
No lo encontrarían en su apartamento, donde todo estaba ordenado y tranquilo. Un pálido resplandor anaranjado entraba por sus ventanas e iluminaba la habitación con un brillo etéreo. Sin embargo, aquí no había vida. Pero, tal vez había un mono pulcramente doblado que gritaba de energía sobre su colchón. Y quizá justo al lado había una diadema. Tenía un aspecto magnífico, brillando a la luz. Grande y honorable. Gritaba logros.
Pero Naruto no estaba allí.
Había una extraña cualidad en la forma en que la hierba bailaba con el viento, ocultando susurros de pasos y la promesa de un viaje.
Había una extraña cualidad en la forma en que el sol se ponía, brillando más feroz de lo que nadie podía recordar. Había un brillo en el cielo ese día.
Sabían que todo iba bien.
Pero Naruto no estaba allí.
Tal vez había estado escondido debajo de todo esto, tal vez había decidido aprender lo que significaba que el tiempo pasara. Sin embargo, Naruto no sería visto ni escuchado por mucho tiempo.
O, tal vez, de vez en cuando, por varios lugares del continente, la gente vería sombras, y llegarían informes de un hombre, con el rostro oculto bajo varios artículos como una máscara de tela que le cubría la parte inferior de la cara y una diadema opaca que le cubría la frente y un solo ojo.
Registros de ojos azules y pelo rubio como el sol.
¿Dónde estaba Naruto?
Él había seguido adelante, y tú también deberías.
