Tormenta de sombras [ LIBRO 1 ]

⛈️Capítulo 19: Mi Novio

Antes de subir llevamos a pita ha hacer sus necesidades, no para de caminar y hay mucho viento, nos empezamos a mojar poco a poco.

–Vamos pita, tu puedes – digo ya tiritando.

Max me da la mano, seguimos caminando y ya siento mis pantalones muy mojados miro los de él y están igual o peor que los míos, ya que pone el paraguas prácticamente todo sobre mi y él esta casi todo descubierto, miro a Pita y sigue oliendo cada rincón, hasta que por fin llega a unas plantas y hace pis, la tomo en brazos, tiene todas las patitas mojadas y su capa muy húmeda, subimos corriendo hasta el departamento, pita se sacude, Entramos y pongo una pequeña estufa eléctrica, para que se entibie un poco el departamento, estoy tiritando, tengo mucho frio y estoy toda mojada, miro a Max y me río, esta literalmente todo mojado, no puedo evitar apreciarlo, se ve increíblemente sexy así, las gotitas de lluvia caen por su rostro, mi corazón se dispara y del frio extremo pase al calor, nos miramos y se corta la Luz.

–¿Enserio? – digo mirando hacia arriba.

–Así parece – dice Max, aunque no puedo verlo, estoy segura que tiene una cara de satisfacción gigantesca, me dirijo a la ventana y veo todo oscuro – debió ser un corte general – dice Max.

–Yo creo, me iré a cambiar, espérame aquí – digo con énfasis en ¨Aquí¨, se ríe, sabe que estoy nerviosa.

Enciendo la linterna de mi celular, para poder ver donde camino, ya que debo pasar por un pasillo, para llegar a la habitación, entro y cierro la puerta, pero pita llega corriendo, no para de ladrar hasta que le abro, entra y cierro la puerta, seco sus patitas y le cambio su capa por otra, luego busco mi pijama de satén, es de una pieza y espalda descubierta color palo rosa. Cuando lo tengo puesto, me siento y analizo la situación, no puedo salir así de la habitación, ¿En que estoy pensando?, pongo los ojos en blanco, esa es la cosa, no estoy pensando, busco mi otro pijama que también es de satén pero de 2 piezas, short y un top color negro, que tampoco debería usar pero no tengo nada mas, me tomo el pelo y me pongo un sweater, subo el cierre hasta arriba, voy al baño, busco toallas y salgo de la habitación, noto que Max puso la linterna de su celular, apago la mía y sigo la luz, cuando llego esta sin chaqueta y peor aun, sin camisa, lo veo de espaldas ,no se que hacer, creo que debería devolverme a mi habitación, poner llave y no salir en toda la noche, mi corazón empieza a latir y me muerdo el labio, a pesar de la poca luz, gracias a la linterna de su celular puedo apreciar su espalda, es grande y fuerte, puedo ver cada musculo en ella, es demasiado perfecto, cierro los ojos, basta Emma compórtate, respira mujer, respira, me digo, él se gira y me asusto, se caen las toallas y me agacho de inmediato a buscarlas, me levanto y se las paso sin mirarlo.

–Toma – le digo, me giro y me dirijo a la cocina, ¿para que?, ni idea pero no hay mucho a donde poder ir a esconderme.

–Gracias – dice – estoy todo mojado, por eso me quite la camisa, ¿te molesta si me quito los pantalones? – mis ojos casi se salen.

–Eh... – no me sale ni una palabra – no hay problema –  digo apenas.

Escucho como suena su cinturón y cierro los ojos,  mi piel hormiguea, ¿Qué estoy haciendo?, trato de calmar mi respiración, no pienses nada Emma, es como si fuésemos dos amigos, no pasa nada, es lo mas normal del mundo, claro... tener a un tipo así de sexy, sin ropa, justo detrás de mi, es muy normal, a todas les pasa, escucho los pasos de Max y por la linterna veo su sombra acercarse, ¡ay! No, ¿por qué me mandan pruebas así?, ¿Qué hice yo para merecer esto?, miro hacia arriba, ¿por qué?, quiero hacer las cosas bien , así no ayudas.

–Emma – dice Max – ¿estás bien? – pregunta.

–Sí, solo te daba privacidad – si claro, se ríe – ¿Por qué te ríes? – digo girándome y lo veo ahí semidesnudo frente a mi y no, no puedo seguir hablando, sí señores, me comió la lengua el ratón, ni siquiera mi mente fluye, ósea jamás, nunca de los nunca, pensé que estaría en una situación así.