araña

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Sonidos se escuchaban desde tu cuarto, parecía que alguien estaba gritando y pidiendo ayuda.

── ¡Gideon, Gideon, ven a ayudarme! ── su voz se te hacia familiar, intentaste abrir tus ojos procesando lo que estaba ocurriendo. Te levantaste dando un quejido en el proceso, parece que esta vez alguien quiere interrumpir tu siesta.

Cuando aclaraste bien tu visión, agarrando tus lentes, pudiste escuchar bien con claridad la voz. Era Scott y venia desde afuera del cuarto, tu teléfono estaba repleto de mensajes y llamadas perdidas de Scott, te estas preguntando mentalmente que mierda acaba de hacer el idiota de tu novio esta vez. Le gritas que ahí iras intentando levantarte de tu cama, no te importo acomodar tus lentes o mantener una buena postura, sales del cuarto para ir caminando hacia donde se escuchaba la voz de tu novio, parece venir de la cocina.

Al momento de pasar, encuentras a Scott, asustado y con una escoba en sus manos, muchas cosas estaban tiradas y desparramadas por el suelo. Scott puso sus ojos ante vos.

── ¡GIDEON, MATA A LA ARAÑA, YA!

¿La...qué?

¡LA ARAÑA, LA MALDITA ARAÑA! ── gritaba Scott sosteniendo fuerte la escoba y mirando para todos lados frenéticamente. Definitivamente, esto era lo más estúpido que estabas presenciando y tenias ganas de tirar a tu novio por la ventana en cualquier momento pero mejor preferias mantener la calma.

── Déjame ver, ¿Dónde está? ── dijiste, ayudando a Scott a buscarla con la mirada.

Scott, temblando, apunto con su dedo hacia uno de los rincones. Te diste la vuelta para ver con tus ojos a la araña, quien se encontraba super quieta en el rincón en donde Scott apunto. Para sorpresa de nadie, la araña era pequeña.

Scott corrió hacia a vos, aferrándose detrás tuyo, esperando a que tengas la insignificante valentía de matar a una puta araña que era mucho más pequeña que la palma de tu mano. Él te extendió la escoba y te decidiste acercar lentamente al lugar de la araña.

Sin fuerza, golpeaste a la araña con la escoba, haciéndola caer al suelo muerta e indefensa.

Scott sintió un alivio, dando un suspiro que calmo su desesperación.

── ¡Por finnn-!

Se impacto cuando sintió como vos le diste un pequeño golpe en la cabeza con el palo de la escoba.

── Maldita sea Pilgrim, la próxima vez que me levantas por estas cosas te juro que la única cosa que mataré será a vos ── dijiste claramente molesto al respecto, odiabas que te interrumpan por cosas estúpidas.

A pesar de eso, Scott se rasco su cabeza intentando sanar el pequeño golpe y dio una sonrisa vergonzosa al respecto. Internamente te pareció tierno el gesto mientras por fuera decidiste soltar un suspiro y extender tu mano para acariciar la cabeza de tu novio.

── ¿Quieres que te ayude a ordenar todo esto?

Hm, nop, mejor deja que me encargue yo.

No dijiste nada al respecto pero aceptaste la decisión y solo te fuiste de la cocina, regresando a tu cuarto para acostarte de nuevo.

...

"¡GIDEON, HAY UNA CUCARACHA VOLADORA EN EL FREGADERO-!"

"MALDITA ARAÑA" | scodeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora