— Australia, me siento cansado — expresó sobándose la cabeza.
— ¿Casado? pero si te divorciaste ayer...
— ¡Cansado, Australia, cansado!
— ¡Pero no grites! despertarás a Dolly, Nueva Zelanda dijo que si ella no dormía sus doce horas diarias se comportaba mal con el rebaño.
— ¿Se hizo pastor?
—Algo así.