Un Amor Inesperado ʰᵉˡᵉⁿᵃ ᵇᵒⁿʰᵃᵐ ᶜᵃʳᵗᵉʳ | En Edición

Capitulo 10 (editado)

T/N:

Mi sueño fue interrumpido por la luz del sol que se colaba por la ventana de la habitación y unas tiernas caricias en mi mejilla, lentamente fui abriendo mis ojos notando que la emisora de esas caricias era Helena sentada en la esquina de mi cama

-Buena días- dije aún medio dormido mientras me estiraba para terminar de despertar

-Buenos días mi niña- respondió dejando un beso en mi frente

-Tu ya estás arreglada eso es trampa- Helena reía levemente en respuesta

-Te dejo para que te arregles- sin esperar respuesta salió de la habitación, después de unas cuantas vueltas en la cama me preparé para salir a dónde sea que me llevara Helena.

Esta vez llegamos a un restaurante más sofisticado y una mesa para dos solamente

-¿Comida para dos?-

-Si te traía a uno de los mejores restaurantes de Londres esperaba que solo fuéramos nosotras-

-¡Que lindo!- Helena sonrió tiernamente

-Bueno y ¿a qué debemos todo esto?- Helena tomo una gran bocada de aire antes de contestar

-Se que viste las notas de mi ruptura con Rye y que te llegó a afectar lo que decían en ellas sobre ti y…-

-Esta bien, supongo que una de las ventajas de ser de Latinoamérica es que te acostumbras a qué hablen de ti ya sea bueno o malo sea quien sea incluso persona que ni sabes de su existencia-

-¿Encerio?- asentí en respuesta y la velada continuo en una conversación con temas banales

En un momento de la velada tuve que ir hacer mis necesidades fisiológicas, al salir del baño tropecé con una linda pelirroja rápidamente me disculpé por mi torpeza y ella hizo lo mismo ambas seguimos nuestro camino y nos percatamos que nuestras mesas quedaban cerca, la conversación entre Helena y yo se veía interrumpida por rápidas miradas entre esa bella pelirroja y yo, hasta que sentí la penetrante mirada de Helena la cual hizo como si nada hubiera pasado.

-De postre ¿que te gustaría princesa?-

-Mmm creo que un pastel de chocolate- Helena rápidamente pidió al mesero trajera uno

En cuanto la perfectamente  decorada rebanada de pastel llegó tome un pedazo, disfrutándolo al punto de bailar, hacer algunos ruidos extraños y casi devorar el pastel, mis acciones hicieron reír a Helena y aquella pelirroja que miraba el show desde su mesa.

Antes de irnos una mesera se acerca a darme una nota con una rebanada de pastel lista para llevar antes de que Helena reprochara la mesera se adelantó a decir que lo había enviado la chica pelirroja.

Sonríe levemente agradeciendo a la mesera y ganandome una mirada asesina de Helena mientras yo leía la nota escrita con una hermosa letra cursiva.

-¿Por que me miras así? Es lindo-

-Porque eres muy inocente y no te das cuenta que te está coqueteando y al parecer también espiando-

-¿Con una rebanada de pastel?-

-Si-

-Aww estás celosa-

-Claro que no y si ese fuera el caso…- reí levemente

-¿Que dice la nota?- Helena dijo con más seriedad

-Tiene su número y un perdón… Que tierna te vez así-

-¿Asi como?-

-Celosa y no lo niegues por qué se nota de aquí a la luna- Helena rodó los ojos para después salir del restaurante reí llendo tras ella, despidiéndome con una sonrisa de aquella chica.

-Noticia del mes "Helena Bonham Carter es una celosa con su mejor amiga" o "Helena Bonham Carter celando a su mejor amiga"  no ya se mejor "Helena Bonham Carter una celosa muy linda"- Dije en todo burlon mientras iba detrás de ella al coche

-¡T/N!-

-Me pase perdón, es que…-  Helena me miro sería

-Ya me callo perdón- dije para después tapar mi boca con las dos manos, Helena reia mientras se acercaba a mi quitando delicadamente mis manos de mi boca

-No es necesario que te calles, me encanta tu voz- la empuje de forma juguetona

-Ya que me pones nerviosa-

-Me encanta hacerlo-

-¡Helena!-

-¡T/N!-

Ambas subimos al auto con una sonrisa, mientras Helena maneja le escribo a Valeria contando lo que pasó en el restaurante.

-¿Con quién hablas?-

-Valeria-

-Saludala de mi parte-

-Sip-

-¿te puedo preguntar algo?-

-Dime-

-Olvidalo-

-Anda dime-

-Me- dije casi sin soportar la risa

Los días fueron pasando tan rápido que mis últimos días en Londres están cerca, Helena no lo sabía pero no se si fue mi curiosidad o estupidez pero le mandé mensaje a aquella chica del restaurante ahora ya sabía que se llamaba Elizabeth.

Chateaba con Elizabeth de vez en cuando conociendo un poco de ella y ella de mi se podría decir que nos volvimos amigas muy rápido, se volvió mi confidente en Londres, cuando los planes de Helena ya terminaban salía con Elizabeth de fiesta, a un bar o incluso a comer a algún restaurante.

Muy malas decisiones porque al llegar el Viernes me confesó que le atraía y que por mi se iría a vivir a México entre otras cosas, fue muy lindo todo lo que dijo pero mi corazón siempre será de Helena entonces con dificultad lo dejamos en amistad.

Helena mientras me llevaba de paseo a lugares muy lindos por Londres mientras conocía amigos de ello que no eran muy  conocidos, eso sí los paparazzis nunca faltaban  y Helena les daba contenido abrazándome dándome besos en la mejilla, acariciándome y sonrojandome cada que podía, enamorándome más de lo que estaba enamorada desde que la vi por primera vez en pantalla.