Lisa, una joven relajada y desenfadada, amante a los deportes extremos, ademas de ser popular con las chicas y conocida por ser una fuckgirl, es la hija del presidente de los Estados Unidos. Jennie, a diferencia de Lisa, es una chica muy estricta y...
- Algo así, quiero mostrarte un lugar muy especial para mí.
- Está bien. Te seguiré a donde me lleves.
Llegamos al lugar, era el sitio donde solía ir de vacaciones con mi familia cuando era pequeña. Empezamos a bajar las cosas y caminar por un camino de flores hasta llegar a la cabaña. Entramos y colocamos las maletas.
- ¿Que te parece?
- Es hermoso, amor. Aunque pensé que regresaríamos a la Casa Blanca, pero veo que aún tienes energía.
- Aún quiero estar de luna de miel contigo, amor.
- Yo también, preciosa. ¿Te imaginas en el futuro nuestros hijos corriendo por doquier? ¿Quieres tener hijos?
- Claro que quiero tener hijos mi amor. - me levante.- Ven, acompáñame. Es nuestro último día de luna de miel, y creo que debemos terminarlo como se debe.
♧♧♧♧♧ Lisa'sPOV ♧♧♧♧♧
- ¿Te gusta? - me preguntó mi esposa.
-Me encanta. ¿Mandaste a arreglar todo esto? Estoy tan sorprendida. No tengo palabras para explicar cómo me siento.
-No pudo nada mas, solo que esta noche seas mía, Lisa. Esta noche yo tomo el control.
- Mmmm, siempre lo has hecho, cariño. Sabes que haré cualquier cosa por ti. Dime lo que quieres y lo cumpliré, al menos lo intentaré. Aunque dudó que seas tu la que mande aquí.
Le di un beso suave a mi esposa, y ella comenzó a desvestirse. La miraba, y no podia creer que fuera mi esposa, por ellla estaba haciendo cosas que nunca haría por nadie más.
Tomé su rostro, sus labios. Rodeando su cintura con mis brazos, prometí hacerle el amor de tal manera que no podría olvidar nuestra luna de miel.
Lentamente caímos sobre la cama, lentamente la bese, saboreando cada parte de boca, su cuerpo era atraído a mi como un imán. Acaricie su cuerpo y lentamente saque completamente su ropa, mientras le susurraba palabras de amor.
Con besos húmedos base sobre su cuerpo hasta llegar a su zona sur, viéndola con total adoración. Me detuve a la altura de vagina, y lentamente comencé a dar pequeñas lamidas y succionar delicadamente. Los gemidos de mi esposa eran cada vez fuertes.
-¿Te gusta?- dejó otro hilo de saliva, acercándome para limpiarlo con la punta de mi lengua.
Los ojos de mi mujer se viraron de placer, su cuerpo estaba caliente y ahora resbaladizo por la exudación. Me gustaba sentirla así, toda mia.
-Mmmm sigue cariño...- Jennie se mordió el labio, quería gemir aun mas fuerte.
Comencé a mover sus dedos hacia arriba, en círculos lentos que se presionaban sobre ese punto sensible dentro de Jennie. Mi lengua recorría libremente de arriba hacia abajo sobre la protuberancia hinchada. Levante la cabeza y miré con anhelo su vagina antes de volver a chuparla.
Jennie se retorció agarrando con fuerza las sabanas, con mis dedos lo suficientemente largos comencé a meter la previa de lo que sería despues. Si seguía de esa forma iba a hacer que se corriera rápidamente.
-Ya no lo soporto mas, quiero tu polla. -exigió entre gemidos, agarrando mi cabello sin mucha delicadeza. Sonreí ante sus palabras, Jennie no solía exigir las cosas de esa forma. Era incluso respetuosa en el sexo..- Ahora, Manoban. Meteme tu polla, rápido.
- Así me gusta, dominame princesa. - Jennie murmuró una blasfemia, cerrando los ojos, medio adormilada.
- maldita sea, rápido amor.
Sonreí, levante mi cuerpo hacia arriba y vi como jennie me daba la vuelta quedando ella encima mio, tomando por sí misma la cabeza de mi polla para mojarlo con el líquido de sus pliegues para luego ponerlo en su entrada y lentamente sentarse. Ambas soltamos un gemido por la sensación, demasiado estimuladas como para esperar mucho más. - jennie, te ves muy sexy desde aqui cariño, Mmm si, montame.
Jennie se movia tan deliciosamente, haciendome sentir demasiado placer, cada que ella bajaba mi pelvis chocaba con su trasero. Mi polla se mantuvo tensada entre los pliegues, mientras disfrutaba de sus senos rebotando en mi rostro.
Jennie subía y bajaba con libertad sobre mi polla. -¿te gusta cariño? -La voz de mi esposa sonaba tan rasposa, dándole un efecto sexy, jennie agarro mi cuello. - Di que eres mia. - dijo con una mirada dominante.
- so- soy tuya mi amor....- mi voz casi no salia, estaba fascinada al verla así.
- Mmmm, lisa muévete .
Obviamente así lo hice,Jennie chilló cuando empecé a moverme.mientras ella presionaba mas mi cuello haciéndome gemir, con la adrenalina a mil.
- Así me gusta, obediente amor.
Sonreí, porque no podia creer que soy la ofortunada de tenerla asi. Respiró con tanta fuerza que se escuchó por encima de los sonidos de los glúteos de Jennie golpeando mis muslos cada vez que bajaba.
-No quiero que te detengas. -admito con la misma sonrisa, llevando mis manos a su cintura para ayudarla a subir y bajar rápido y duro. Yo estaba consciente de que con ella en esta posición seria casi imposible que yo pueda aguantar, pero también sabia que esto solo era el principio de la noche.
- ¿estas cerca cariño?
- S- sí...- gemí, jalando su rostro para besarla.
Un gemido se salió de mi boca, al sentir sus paredes presionar mi polla, entonces senti su orgasmo sobre mi, haciendo que yo también llegase a mi extasis, dejando que el liquido espeso de mi semen bañaran el interior de jennie.
Con cansancio tome su rostro, y sonriendo la bese lentamente.
- eres mia, eres mi esposa.- dije mientras acariciaba su rostro con delicadeza.
- tu tambien eres mi esposa, y yo soy la unica mujer para ti. - sonrie con sutileza.- descansamos un poco y continuamos.
-¿descansar? No cariño, ahora me toca a mi.
La noche seria muy larga, y este solo era el inicio, el inició de nuestra vida de casadas, y el inició de nuestra familia. Nunca mas me sentiré sola, ahora la tengo a ella, mi esposa, mi mujer, mi amiga y sobre todo la dueña de vida.
Aveces la vida, te mantiene sola porque que te guarda para alguien en especial, que tarde o temprano sera parte de ti, así sea de la persona menos esperada, como por ejemplo de tu enemiga política.
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