En mi aburrimiento recordé la película (papá soy una zombie) y me dije a mi misma, ¿Qué tan mal saldría una historia de esta película?, bueno no lo sé, eso lo deciden ustedes
Esta es una de mis primeras historias, si ven algunas faltas de ortografía no duden en decirme, al igual si tienen una duda.
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Narra t/n...
Estaba terminando de acomodar mi cuarto, mi hermano me había levantado temprano, pues el camión de mudanza iba a llegar temprano.
Yo solo agonizaba, por todo el tiempo que íbamos a tardar en acomodar, pero mi hermano me dio una sorpresa que no me esperaba.
Había contratado también para que acomodaran los muebles, eso sí que me sorprendió y me gustó.
-¿Y por qué los contrataste?- Le pregunté con una sonrisa mientras cerraba la puerta después de pagarles.
-¿Por qué como piensas que mua puede acomodar todo eso?- dijo haciendo una pose dramática -Aparte tengo que salir-
Yo solo solté una risa y lo mire -¿Te vas a tardar?- Me, le quedé viendo.
-No lo sé pequeña, pero intentaré no- Dijo mientras se ponía un sueter -Pero, traeré comida, por lo mientras come lo que nos dio el padre de Dixie-
-Pues sí bobis, el cocina muy bien- Sonreí y le acerque las llaves de la casa.
-Tú igual cocinas bien, compraré cosas, para que cocines si tienes hambre- Me contesto mientras tomaba las llaves y me despeinaba para ir a la puerta. -Tratare de no tardar- sin más salió.
Mi sonrisa se borró, odiaba cuando alguien se iba, no me traía recuerdos buenos, mis ojos se llenaron de lágrimas, pero entonces agite mi cabeza.
-Se que lo hace por los dos, así que yo también lo are- Dije para mí misma mientras sacaba mi celular y buscaba trabajos cerca.
Pasaron unos minutos y encontré un trabajo, era perfecto, solo que sabía que mi hermano jamás me iba a dejar trabajar.
Sin importar mande mi solicitud, esperando que me haceptaran. Estaba ansiosa y miraba mi celular para ver si contestaban, pero nada, y así me la pasé unos minutos, que para mí eran horas, hasta que tocaron la puerta.
-¡Voy!- Grite dejando mi celular en la mesa y me acerque para abrir. Me sorprendí al ver quién era
-¿Dixie?- Pregunté dudosa.
-¿Pues quién más va a ser?- Me pregunto riendo mientras me abrazaba.
-Hace tanto tiempo que no te veía- Dije feliz mientras la abraza de vuelta -¡Vamos!, pasa, cuéntame todo lo que has hecho-
Dije para tomarla de la mano y adrentarla a mi casa, subimos a mi cuarto.
-Es muy bonito tu cuarto- Me dijo viendo cada parte de este.
-Gracias, apenas lo decore- Dije con una sonrisa mientras me sentaba -Vamos, hay que ponernos al día-
Ella sonrió al igual que yo y nos quedamos platicando de todo lo que había pasado en estos años.
