Prohibido Enamorarte Del Enemigo

Capítulo 36.-Un Admirador Secreto.

Pero donde está la fotografía que tenía aquí mi padre, la busco por el lugar y nada —¿Dónde estará? ¿A caso mamá se le llevo a casa? Eso espero si alguien más se la llevo descubrirán que ellos tuvieron una hija.

Se quedó por un instante pensando cuando salió de su trance miro su reloj —Ya es muy tarde casi van hacer las cinco, salió del lugar y se dirigió a la oficina del señor Hayashi.

Toco a la puerta no más de dos veces cuando le dio el pase. —Permiso señor Hayashi aquí están los oficios que me pidió

Aquel hombre de ojos azules tomo la carpeta de los oficios los reviso—Excelente trabajo señorita Makino, ahora comprendo porque Sesshomaru la escogió como su asistente.

—Así que al rato pasaras a las oficinas de todos los que asistimos a la junta para que te firmen.

—Sí señor.

Entonces nos vemos al rato señorita Makino y Sesshomaru vayan a descansar un rato.

La azabache se despidió, se retiró del lugar, Sesshomaru salió tras ella y ambos entraron al elevador.

Iba en silencio cuando ese chico de ojos color dorado fue el que hablo—Señorita Makino.

Ella lo miro—Si diga joven Taisho.

—Aceptaría desayunar conmigo.

La joven de ojos color chocolate algo asombrada —Claro que sí, ahora mismo.

—No, sería más al rato hasta que se desocupé de la encomienda que le dijo el señor Hayashi.

—Hmm está bien. —Ambos salieron al estacionamiento y cada uno subió a su auto.

La azabache llego a su casa ya casi eran las 6 de la mañana entro sin hacer mucho ruido para no despertar a su mamá.

Apenas iba a subir al segundo piso cuando su mamá le hablo. —¡Kagome!

—¡Mamá! ¿Qué haces levantada tan temprano no me digas que no dormiste?

—Pues—contesto mirando a otro lado.

—Oyes no hagas eso, tú debes descansar bien.

—Hija es que me preocupo por ti.

—Por eso te avise

—Aunque me avises me preocupo por ti y estar fuera de casa hasta muy tarde bueno ya amaneciendo.

—Hay mamá—esa chica abrazo a su mamá.

—Kagome tenemos que ir al panteón hoy se cumple un mes que el—no termino la frase y derramo lagrimas que no pudo contener.

La azabache la abrazo—¡Mamá! Ha pasado el tiempo muy rápido, si tenemos que ir, pero sabes que debemos ir por separado no nos deben ver juntas.

—Hay hija como me gustaría que fuéramos juntas y te olvidaras de esa venganza sin sentido.

—Mamá tengo que encontrar al asesino de mi padre. —esto lo dijo empuñando sus manos.

—Kagome a veces te desconozco ya no eres aquella niña que eras amable, gentil, agradable.

—Pues esa chica de quien hablas murió junto con mi padre lo que solo tengo en mi mente es venganza.

—Veo que no haré cambiarte de opinión, sabes que la decisión que tomes siempre te apoyare hija.

Esa chica miro a su madre —Gracias, cambiando de tema la junta que se hizo hoy con urgencia era que se debería nombrar el director general de la empresa no lo están pidiendo de la empresa donde mandamos el proyecto.