1 Pete

576 54 2
                                    

"Pete, levántate erguido y aspira".

Hago lo que mi madre me pide mientras sube la cremallera de mi pantalon. Ella tira con fuerza y ​​la oigo esforzarse, pero no se mueve. Ella deja escapar un resoplido irritado y luego entrecierra los ojos.

"¿Bebiste agua todo el día ayer?"

"Sí." Siempre hago lo que me pide y, aunque nunca le he mentido, parece que no me cree.

Si pudiera controlar cada bocado de comida que entraba en mi boca, lo haría. Ella me puso a dieta antes, pero luego mi papá se enteró y se fue por las nubes. Mamá puede salirse con la suya en muchas cosas, pero en un raro momento en que papá se resiste, todos se alinean, incluida mamá.

"Tendremos que conseguir algo más". Ella chasquea y niega con la cabeza. "Qué desperdicio de un hermoso traje".

El comentario pasivo-agresivo es algo a lo que estoy acostumbrado, así que la ignoro. Me quito el pantalon y ella se da vuelta para revolver el estante de ropa que su comprador personal trajo hoy. Esto es muy exagerado para una fiesta de té en el patio trasero, pero mantengo la boca cerrada. Me encantaría decirle que si quiere tanto el traje que debería usarlo ella misma. Aunque colgaría de su esbelta figura y parecería una bolsa de papel. Hace años encontré fotos de cuando ella modelaba. Ella era hermosa entonces y todavía lo es ahora. Ella es toda piernas, con cabello sedoso y su piel también es perfecta.

Estoy constantemente decepcionado por no haber obtenido uno de sus rasgos del acervo genético. Soy pequeño, cintura pequeña pero caderas anchas y muslos llenitos, mi cabello es imposible de controlar a menos que haya un profesional cerca. Pecas se extienden por la parte superior de mis mejillas que ni siquiera el mejor maquillaje puede ocultar. Ella nunca comenta sobre las diferencias entre nosotros dos, pero no puedo arreglarlo, aun cuando ella hace todo lo que está en su poder para encubrir todos mis defectos.

Si bien puede ser dura con muchas cosas, también puede ser dulce y solidaria. Nunca he entendido cómo puede ir de un extremo al otro, pero en ella todo suele ser de una forma u otra. No hay grises, sólo es blanco y negro, y es una lucha constante mantenerse al día con sus cambios de humor. Algunos días creo que la odio y otros la amo. Quizás obtengo de ella más de lo que creo.

"¿Qué tal algo que sea un poco más el chico de al lado? Debería haber empezado con eso. Te verás adorable con tus hoyuelos y ropa de verano, e incluso puedes usar tenis". Ella habla más consigo misma que conmigo, pero aun así respondo.

"Suena asombroso."

"Perfecto." Me entrega una camisa blanca. Cuando la sostengo, me doy cuenta de que no llega a mi hombligo.

"¿Tan corto?".

"Sí".

No puedo quejarme demasiado. Por suerte, cuando me pongo el pantalon se ajusta a mi cintura, luego comienza a ensancharse en mis caderas. Es hermoso y me sorprende que realmente me encanta cómo me queda.

"¡Oh! ¡Te ves perfecto!" Ella entra corriendo a la habitación mientras busca mis tenis y cualquier accesorio que quiera agregar.

A veces pienso que soy más su muñeco disfrazado que su hijo. Me encantaba cuando era más joven, pero ahora quiero usar cosas que elijo yo mismo. Aún así, este es un pequeño precio a pagar para hacerla feliz, así que la dejo hacer lo suyo. Sobre todo porque el té de esta tarde es con sus amigas.

Desde que crecí, ella me ha incluido en más eventos. Creo que podría estar preparándome para ser un mini ella y asumir algunas de las responsabilidades que ella tiene para la familia.

"Y llegamos justo a tiempo". Mamá me toma de la mano y me lleva fuera de mi habitación.

Bajamos las grandes escaleras que conducen a la entrada principal y me doy cuenta de que ni siquiera sé para qué es el té de esta tarde.

Volviendote MioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora