Matrimonio Concertado (kokonoi Hajime x Inui Seishu)

Rosa azul

"para mi ángel"

El humo recorre sus pulmones. No puede ver, la manta sobre su cabeza, el humo y las lágrimas le impiden la vista. Grita algo, llama a alguien, no sabe a quién, no puede escuchar su propia voz. Se ahoga y tose con el llanto entorpeciendo su respiración. Las lágrimas irritan la quemadura en su cara mientras siente la quemadura en su pie y cadera comenzar a escocer. Tose y solloza antes de sentir otro cuerpo levantándolo y acunándolo mientras lo aleja de las llamas.

Seishu se despierta de inmediato. Siente la aspereza en la garganta y puede sus cicatrices arder como si aún estuviera en ese incendio. Las lágrimas de angustia y desesperación corren por sus mejillas y da jadeos rápidos para intentar tomar aire puro, no humo — carajo — se queja intentando calmarse, ha tenido sueños de esa noche desde que sucedió, no hay semana en el que no sueñe con las llamas ardientes y el dolor sobre su piel.

Seishu mira su celular, riendo al ver la fecha junto con el mensaje que la acompaña "feliz cumpleaños, amo". Akane había configurado su celular para que lo felicitara en su cumpleaños. Suspira y se levanta de la cama. Toma un atuendo de ropa y luego pasa aproximadamente media hora entre la tina con agua fría, sintiendo la calma invadirlo cuando el frío rodea su cuerpo y las tres cicatrices comienzan a enfriarse.

Es su cumpleaños, pero nunca le gustaron las fiestas ni nada ostentoso. Su familia hacía algo simple, preparaban su comida favorita, un pastel casero y le daban un obsequio junto al mismo regalo de todos los años, rosas azules. Seishu sale de la bañera, se peina el cabello recogiendo la mitad de este, se coloca el conjunto de ropa junto a los tacones rojos de diseñador que le habían regalado en su último cumpleaños. Se había sentido mal cuando vio que le regalaron dos pares de tacones, y no solo uno como de costumbre, pero igual lo agradecía, eran de un diseño exclusivo y le encantaban, la única muestra del creador es una M rodeada por un círculo en la suela.

Cuando baja a desayunar, hay un silencio profundo y tenso en la mesa, y sabe que su padre ya lo sabe, por lo que levanta la cabeza y lo mira. El señor Inui deja su tenedor y levanta su mirada — haz el anuncio — ordena el hombre y su mujer lo mira con curiosidad mientras su hija mantiene la vista en el plato.

Seishu toma aire y un pedazo de pan entre sus dedos — Me casare con Kokonoi Hajime — decir las palabras en voz alto le brinda una seguridad y aceptación que no sabe describir, pero lo hacen sentir seguro e incluso cómodo.

— ¿Qué? — dice la señora Inui y hay una mirada en sus ojos que sus dos hijos no pueden entender, no es la preocupación que vieron antes cuando se anunció el compromiso con Akane, esta es una preocupación diferente, hay algo más en ella, algo que Seishu no distingue ¿Odio? ¿Miedo? ¿Decepción? Seishu no sabe que es.

— Yo también quisiera saber cómo paso — dice el hombre de ojos verdes con un suspiro. No reacciona mucho, lo medito la noche anterior y aunque sabe lo que implicaría, aunque sabe que esto no es lo mismo y que entregar a Seishu implica más que entregar a Akane, lo acepta, con un pensamiento "no hay opción".

— Solo paso — dice con simpleza, aunque su hermana y él ya habían creado una historia para mentir. No tiene ganas de hablar en su cumpleaños de cosas como estas que alteran el estado de ánimo, no le gusta celebrar a lo grande pero tampoco estar triste es su fecha especial.

Akane lo mira y sabe que su hermano no piensa decir mucho más así que ella habla — Seishu me acompañó a mi visita para hablar con kokonoi. Él solo se quedó afuera de la oficina. Al salir kokonoi lo vio y dijo que no quería casarse conmigo, que lo haría con Seishu y que, si no lo aceptamos, bueno, nos destruirá — cuenta la historia rápido y sin dar detalles para no crear huecos y preguntas.