💣Cap 17🌙

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Demonios II

En un bosque se podía ver completamente envuelto en llamas, todos los árboles ardían y las criaturas cerca corrían asustadas, mientras, todo lo verde se volvía rojo... Una de estas criaturas que no mostraba su forma sólo que era bastante grande caminó entre las llamas soltando un sollozo mientras miraba aquella catástrofe...

(...)

Volviendo a la actualidad, Aegan se encontraba frente a la demonio que los atacó, detrás de él Elisette y Lana quienes estaban asustadas.

La demonio sonrió y sus largos cabellos que acaban en fuertes mandibulas se lanzaron hacia los tres.

Lana agarró a la princesa y se lanzó a un lado impulsada por sus ondas de aire esquivando una de estas bocas, Aegan esquivó las otras dos y comenzó a correr en dirección a la mujer.

—Tsk él es el más molesto, así que primero... —miró a las chicas y envió tres de esas bocas hacia ellas, Lana rápidamente agarró a la pelirroja y se impulsó saltando hacia las ramas de arriba de un árbol esquivando una.

Luego saltó de árbol en árbol esquivando las otras dos, la tercera volvió a atacarla logrando alcanzarla en el aire, pero detuvo su movimiento de repente, al fijarse en el causante de esto fue Aegan que había aplastado con su pie la hebrea de cabello convertido en liana deteniendo la boca.

La mujer enojada sacó otra de estas bocas siendo la cuarta y la dirigió en contra del chico, las otras tres continuaban persiguiendo a Lana y a Elisette.

—No puedo dejar que Aegan se concentre en salvarnos, su golpe es el único que podría hacerle daño a la demonio —decía la pequeña mientras saltaba por todos los árboles esquivando a las bocas.

—Mierda... Sólo estoy estorbando... —decía Elisette siendo cargada por la niña.

El castaño continuó corriendo acercándose a la peliverde, pero... En un momento cuando pisó el suelo este se quebró y de ahí salió otra de estas enormes bocas sorprendiéndolo. Al mirar al frente por un segundo vio que la demonio había mandado una quinta boca de su cabello por debajo de la tierra.

La enorme mandíbula lo engulló, pero este se resistió agarrando los colmillos intentando separarla, los jugos que secretaba comenzaron a derretir parte de su ropa y una gota cayó en su rostro quemando su piel. Rápidamente se agarró de los colmillos y dio una vuelta saliendo de la enorme boca quedando boca abajo, luego soltó los dientes para que se cerrara y caer arriba de ella.

Por detrás, la otra boca que lo perseguía intentó atacarlo, pero este reaccionó rápidamente saltando y dándole una patada en el aire por el costado alejándola de él.

La boca sobre la que estaba comenzó a moverse tumbándolo al suelo y luego lanzándose a atacarlo, este se levantó rápidamente y se deslizó por el suelo esquivándola y llegando a su tallo, golpeándolo con una patada haciendo que la boca gritara un poco de dolor y cayera al suelo.

Por otra parte Lana se notaba cansada de cargar con la princesa y seguir esquivando las tres bocas que la perseguían.

—Lana... Sueltame... Estas exhausta, no puedes cargar conmigo mientras huyes —decía la princesa a punto de llorar.

—Puedo... Seguir, no permitiré que salgas herida —dijo la chica sudando y con la respiración agitada.

La demonio las vio y sonrió, luego mandó a las dos bocas que luchaban con Aegan hacia las chicas sorprendiendo a este.

—¡Sino quieres que ellas mueran tendrás que sacrificar tu vida! —habló la mujer riéndose como loca.

Aegan se giró rápidamente corriendo hacia las chicas, Lana intentó seguir esquivando, pero se vio rodeada de varias de ellas.

El Demonio de La Luna RojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora