Your love || Hyeongmin, Minseong || Cravity

22|| Estoy atrapado en un laberinto de extrañas emociones

Después de dejar a Seongmin en el trabajo Minhee se dirigió a la biblioteca para dejar unos libros que tomó prestados. Al llegar al lugar notó que estaba lleno y que presentía de que algo importante allí pasaría, así que expectante tomó los libros y entró sin esperar más. Miró a muchas personas, entre ellas las mismas que veía siempre que llegaba a la biblioteca y las saludó como de costumbre, luego fue a la recepción a poner los libros y tocar la campana que estaba en la mesa.

—¿Terminaste de leerlos todos?— preguntó el bibliotecario.

—Sí, estuvieron bastante interesantes— Minhee le sonríe—. Iré a por otros para entregarlos luego.

—Ve a por ello— el bibliotecario mira como el más alto se va a la sección de ciencia ficción.

Minhee entró al pasillo de siempre para buscar libros nuevos porque casi todos los que estaban ahí ya los había leído o pensaba en volver a leer, así que buscó más a fondo por si llegaba a ver algo nuevo. Y entre tanto observar encontró un libro que llamó su atención, justo cuando tomó el objetivo otra mano se alzó para tocar la suya accidentalmente. Se volteó para saber quién quería el libro y apareció un chico de cabello azul celeste que lo estaba observando sorprendido al reconocerlo. Minhee mantuvo su mirada en sus ojos cafés por unos segundos, estuvo cautivado con esos ojos que no se percató que el chico estaba llamando su atención.

—Oye, ¿no eres el chico al quién salvé?— el extraño le preguntó a Minhee.

—Disculpa, ¿quién eres?— enarcó una ceja por el desconocido.

—Oh, no me he presentado. Soy Kim Taeyoung, un gusto— el ahora presentado alzó su mano para que Minhee la tomara.

El pelinegro lo hizo y sonrió.

—Kang Minhee, un gusto también— pensó unos segundos la primera pregunta que Taeyoung le dijo—. Eres el chico que lloró por eso.

—Estaba asustado ¿Okey?. Pensé que realmente lo ibas a hacer, ahora mismo estaría traumado— Taeyoung se molestó un poco.

—Eso hubiese sido mucho peor— el más alto rió.

—Veo que no has cambiado mucho en estos cuatro años. He visto que has crecido más— dijo para recorrer a Minhee con la mirada, observó que era unos centímetros más alto que él.

—Tú tampoco. Pero en fin, ¿qué te trae por aquí?

—Estaba aquí para leer un nuevo libro, aunque parece que alguien más ya lo tomó— el peliazul miró la mano de Minhee.

—Si quieres puedes quedártelo— puso el libro en sus manos.

Taeyoung sujeta el libro con un pequeño sonrojo y voltea hacia otro lado.

—Gra-Gracias— el peliazul tose un poco—. ¿Quieres ir a tomar un café? Podemos conocernos más ya que estamos aquí.

—Me parece una buena idea— Minhee le brindó una sonrisa.

Los dos fueron a la recepción para que Taeyoung pagara el alquiler del libro y luego salir de la biblioteca e ir a la cafetería que estaba cerca de donde estaban. Minhee se sentó en una de las mesas y Taeyoung fue a pedir los dos cafés, al cabo de unos minutos ambos ya se sentían en confianza para decir algunas cosas que estuvieron haciendo desde la última vez que se vieron.

—Entonces eres un buen programador, ¿al menos la paga es buena?— preguntó Minhee.

—Sí lo es, pensé que no me iría bien en esa carrera— el menor rió.

—¿Trabajas para love alarm?

La pregunta tomó por sorpresa a Taeyoung.

—No— respondió—. ¿Por qué?