Jeongin estaba en su habitación leyendo un libro, después de que a lo último Jungkook lo llevara a la escuela él mismo para entregar una tarea y regresar a casa; no tenía ningún problema con Hyunjin, solo que apenas lo conocía y no quería encargar a su bebé con un alfa recién llegado.
Eran muy poco los alfas a los cuales Jungkook y Seokjin dejaban que se acercaran a Jeongin, su aroma a melocotón era lo que los volvía locos y algunos no tenían pudor alguno de silbarle a su hijo cuando caminaban por las calles, y era algo que le molestaba totalmente porque su cachorro quería salir con falditas, vestidos o algunos disfraces.
También cuando el omega mayor o su hermano mayor se dejaban maquillar por Jeongin, dejándose poner brillitos en los ojos y labiales, también pintarse las uñas y ponerse coronas.
—Hola cachorro —saludó su hermano, Chan era un alfa de un metro noventa, sus ojos eran azules con un toque de gris en ellos, sus cabellos eran lacios pero rebeldes de color castaño, de tez blanca, labios carnosos y nariz respingada; su cuerpo era delgado, pero con abdominales y brazos anchos debidos a sus músculos, tenía diversos tatuajes alrededor de su cuerpo, en su abdomen un ángel, en sus brazos y uno en el cuello.
Estudiaba Ingeniería biomédica, estaba en el último año.
—Hola —dijo Jeongin, cerrando su libro y quitándose sus lentes. — ¿Qué pasa?
—Mamá dice que bajes a cenar, tenemos un invitado, Innie —dijo su hermano, pasándole sus pantuflas.
—¿Quien? —cuestionó el menor frotando sus ojitos.
—No lo sé, ¿Hyumon? ¿Hyojin? —se encogió de hombros. — Papá lo invitó a comer por ser el nuevo, como es costumbre y quiere que lo acompañemos.
—¡Es Hyunjin! Le invité galletas de nana.
—Uhm —el alfa alzo una ceja. — Bueno, cámbiate de ropa y bajas, Innie.
Jeongin bajaba por las escaleras a pequeños saltitos, sosteniéndose por el barandal para no caerse, se había puesto unos jeans azules acampando, una camisa de rayas blanco con rojo, sus vans negras y solo había puesto su cabellito a un lado.
—¡Llegué! —dijo Jeongin, cuando salto el última escalón.
—Ya ve a cenar, Innie, tus papás te esperan —dijo nana, una omega de unos sesenta años, sus cabellitos eran canosos, sus ojos eran cafés claros y estaba llenita de amor como le decía Jeongin por su cuerpo corpulento.
El castañito asintió, dejándole un besito en la mejilla y entrar al salón, donde vio a Hyunjin; llevaba puesto unos pantalones negros ajustados a sus piernas, una camisa blanca arremangada hasta sus codos dejando varios tatuajes expuestos y sus cabellos peinados.
—Buenas noches Hyunjin —dijo educadamente, mientras que se sentaba al lado de Chan, quien observaba fríamente al alfa; sí, quizás, solo quizás su hermano mayor era ligeramente celoso con Jeongin, ya que él también era testigo de cómo algunos alfas lo miraban.
—¿Como te fue con tu tarea? —preguntó Hwang al omega menor, mientras que Jungkook y Seokjin estaban eligiendo un vino para la ocasión.
—¿Qué te importa? —preguntó Chan.
—Sólo trataba de ser amable. —respondió Hyunjin mirándolo.
Jeongin solo giraba su cabecita de un lado a otro al ver como dos alfas se estaban gruñendo en la mesa, y eso no le gustaba.
—¡Mami! ¡Chan está gruñéndole a Hyunjin!
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Just let me adore you❁ HyunIn
Random"Los tatuajes de los destinados aparecen cuando se dan su primero beso, confirmando el amor puro que se tienen, haciendo una silueta del sentimiento que tuvieron la primera vez que se vieron". Jeongin es un omega con un aroma muy particular, el cual...