¿Han escuchado de que las estrellas han muerto pero hace años que pasó? Bueno es el caso de las personas que sufren depresión, están muertas hace año pero te das cuenta cuando ya no están físicamente.
Liam... Era el nombre de mi mejor amigo, era la persona más feliz del mundo, amable, dulce, chistoso y cariñoso, nadie sospechaba que ya estaba muerto. 18 de septiembre, era su cumpleaños número 23. había desaparecido hasta medio día, era normal o... eso pensaba, cuando llegué a visitarlo a su casa, me di cuenta que estaba extraño, lo notaba como si algo ocultara, algo que quiere decirte pero si lo hace puede que intentes detenerlo.
-¿Has visto lo hermosas que son las estrellas en mi cumpleaños? Es como si ellas me felicitaran en un día que supongo que es especial
Lo escuchaba detenidamente, tenía una corazonada de que algo malo pasaría pero sentía que no debía detenerlo o sino sería peor
-Claro que te felicitan, es el mejor día del año, es tu cumpleaños, ¿qué cosa sería más importante que tú cumpleaños?
Lo miré para ver que expresión me daba, simplemente alzó sus hombros y miró hacia el cielo que era completamente celeste, cerró sus ojos, ¿en dónde estabamos? En el techo de su habitación, era nuestro pequeño y no secreto escondite, podíamos pasar horas ahí y no era aburrido.
-A veces quisiera ser una estrella... donde brille aunque esté muerto
+¿Cuándo lo harás?
¿Por qué habia hecho esa pregunta? Porque sabía que hablaba de ese tema, no quería hablar entre palabras ya que me daba más miedo
-Esta noche, cuando ya la fiesta termine, será como una muerte natural... Gracias a nuestra amiga que trataja en el hospital, es como una eutanacia
Me vió sonriendo, tomé su mano derecha y la acaricié, sabía lo difícil que era estar en su vida en donde la mayoría de sus familias ni siquiera le interesaba
-Esta bien... De verdad extrañaré a mi pequeña estrella
Toqué su nariz y pude ver nuevamente su sonrisa, me dolía ver que su decisión ya estaba hecha, cerré mis ojos para sentir la brisa del día.
Bajamos ya todo estaba decorado, mi corazón me dolía demasiado, sentía que me ahogaba este sentimiento, tomé su mano para que supiera que tenía todo mi apoyo. La fiesta continuó con normalidad, todos hablaban de sus anécdotas con él, como eran sus travesuras, como si todos supieran lo que iba a pasar con él y así lo despedían, miraba como su sonrisa no dejaba de aparecer, quería gritarle a ellos que él ya no estaría en este mundo, que su sonrisa dejaría de estar entre nosotros pero tenía que callar porque esa era su última voluntad.
Al día siguiente bajé las escaleras de mi casa ya que había mucho escándalo, miré a todo el mundo llorando, estaba su madre, cuando me vió rápidamente corrió y me abrazó.
-Mi hijo, él ha muerto, porque mi hijo, él no tenía que morir...
No sabía qué hacer, qué decir, caí en cuenta que ya no estaba en este mundo y rompí en llanto, todo lo que tenía guardado desde ayer, ¿por qué mi mente me había fallado con no asimilar que no estabas?
Pasaron los años, siempre en tu cumpleaños subía a tu techo, tomaba varias cervezas y recordaba todo lo que habíamos vivido, recordaba las cosas que nunca pude decirte, cada cumpleaños tuyo miraba esa estrella brillante, como "La princesa y el sapo" tú película favorita -Eres mi Evangeline... Liam, me gustas demasiado, perdóname por no decírtelo cuando estabas vivo, cuando tuve la oportunidad...
¿Había algo de malo que me fuera tu lado?¿Me estarás esperando?.. Lo mismo que tú hiciste lo hice, al día siguiente de mi cumpleaños decidí emprender mi viaje hacia ti... Cuando llegué a mi destino y te miré sonreí, corrí hacia tus brazos y sin dudarlo besé tus labios, el lugar pasó de ser borroso a tener colores, vida, aquí si había vida, a tu lado volví a nacer...
