Solo es cuestión de tiempo (#2 Temporales)

-Día 8-

Nathalie Newman nunca le ha tenido miedo a la interacción social, al contrario, siempre he sido de las personas que pasa por algún lugar y saluda sin importar si los conoce o no. El conocer a tantas personas me ha llevado a saber un poco de cada una de ellas, a lo que muchos llaman chisme yo llamo beneficios de ser tan sociable, se que la mitad de esas cosas son mentiras pero no quita el hecho de que prefiero estar con las alarmas activas a pasar un mal rato con una persona que claramente ya se había hecho fama, fue lo que en su momento viví con Freddy, este tenía tantas rayas en su traje y sin embargo me hice la ciega y mira como termine, estrellada, traicionada y siendo la comidilla de todo el instituto.

Muchos creyeron que eso me haría caer, que me verían con la cabeza agacha porque al ser uno de los mejores promedios de este instituto, muchos me tienen en la casilla de nerd con problemas emocionales, pero me encargue de demostrar que tener un buen promedio no es sinónimo de debilidad. Después de todo a mi me encanta romper los estereotipos, no soy la tipa chica nerd que se esconde detrás de un libro, ni la típica chica que se pondrá a tartamudear por algo de atención pero tampoco soy la típica zorra que va detrás de cualquier hombre que le pase por el frente, no niego que el sexo masculino me atrae y que me he dado mis placeres y a diferencia de muchas yo si se marcar el límite entre una sola noche y algo más.

Freddy no sería la excepción.

Es por eso que justo ahora el tablero se ha volteado, él es quién busca mi atención y soy yo quien se encarga de patearlo de vuelta a la mierda de donde salió. Porque puedo ser nerd y calienta hombres, pero no soy el juego de nadie, y eso era lo que él pretendía hacer conmigo, volverme su juego sexual hasta que se aburriera y me desechará, jamás pensó que sería yo la que le pondría fin a lo que ni siquiera debió empezar.

Es por ello que no me sorprende verlo recostado de mi casillero. Supongo que al ser uno de los adolescentes más deseados de este instituto desea volver a poner el juego a su favor, el quedar en ridículo nunca a sido una opción para él, pero lo que él no sabe, es que yo mejor que nadie se como salir ganadora de las situaciones más jodidas.

_ Que demonios quieres ahora, Freddy?

Me cruzo de brazos viendolo con fastidio. Me estresa que ahora parece un estúpido fantasma acosandome en todos lados, yo creo en las casualidades pero esto ya se repite con demasiada frecuencia.

_ Te esperaba.

_ Para que?

Este en respuesta se encoge de hombros con una sonrisa que me causa una ligera molestia.

_ Si no vas a decirme, será mejor que te retires.

_ Nathalie Newman.- da un par de pasos hacia mi, por instinto retrocedo.- Una chica que no tiene pelos en la lengua, aparentemente no sufre de miedo, pero sabes que también eres... La hija de una zorra.

Sus palabras tardan un segundo en ser analizadas por mi, y es ese mismo segundo lo que tardo en levantar mi mano cerrada en un puño e impactarlo en su rostro con tanta fuerza que temo haberme lastimado algún nudillo.

_ Te exijo que respetes a mi madre.

Las palabras me salen en un grito cargado de ira que capta la atención de las personas. Este lleva la mano a el área golpeada y me observa con burla.

_ Solo digo la verdad, tu madre se metió con un hombre casado y ese hombre es mi padre.

Una risa cargada de burla sale de mis labios.

_ La nueva conquista de mi madre es tu padre?.- vuelvo a reír.- que patético eres, Freddy, todo el maldito instituto sabe que tus padres están en proceso de divorcio. Mi madre no está metiéndose con un hombre casado, está con un hombre separado en proceso de libertad legal.