Deafening Silence.

Capítulo Uno.

Olivia en medio de aquel sueño profundo logro escuchar aquella alarma que todas las mañanas interrumpe su descanso, para avisarle de que un nuevo día ya llego y hay que ser productivos.

La chica se dispuso a levantarse de la cama con cuidado de no despertar a su esposo, pues este es baterista en una banda de metal muy famosa al rededor del mundo. El día anterior tuvo un concierto de todo el día empatando con toda la noche, por lo cual tendría su día libre de descanso.

-¿A donde crees que vas tan temprano? -Su grave y masculina v hizo que la chica girará sobre sus talones para mirar a su hombre allí en la cama, con sus cabello desorganizado, sin camisa; dejando ver aquel pecho lleno de vellos.

-John... Sabes que no me gusta quedarme todo el día en la cama, ya no estoy a dieta de nuestro bebé -Respondió Olivia con una mueca en su rostro.

-Ven a la cama, Liam no se escucha llorar, James aún no está corriendo como loco por los pasillos, además de que Oliver esta de visita donde sus abuelos.

-Tengo presente eso, pero hoy iré con mi amiga Emma al centro comercial, ¿lo olvidaste? -Mientras esta caminaba hacia el baño le explicaba el por que no quería estar más tiempo en la cama.

-Iré contigo -Aquellas palabras que salieron de la boca de John no fueron del agrado de Olivia, pero es imposible decirle que no, habría un problema mayor.

-Esta bien, me voy a duchar, ¿vienes? -La chica luego de hacerle aquella invitación, se retiro su pijama y entro a la ducha dispuesta a darse un baño de agua caliente.

Mojo su cuerpo, cerraba sus ojos, jugaba con el jabón de sus manos, estaba en un estado bastante relajante, sintió como su esposo entró a la ducha junto a ella, este la toma de la cintura por detrás y le susurra al oído.

-Que hermosa eres, tu cuerpo lo ame desde que eras una adolescente hasta ahora que eres mamá de mis tres hijos.

Aquellas palabras hicieron que un escalofrío recorriera todo el cuerpo de Olivia, su esposo siempre ha sido un hombre mi romántico y detallista.

-Orgullosa estoy de ser la madre de los hermosos hijos que me diste -Luego de que la morena pronunció aquellas palabras volteo para encontrarse cara a cara con John y así empezar con un beso lleno de pasión.

(...)

Luego de un baño relajante y orgásmico que tuvo aquella pareja, salieron de allí para vestirse. Olivia decidió por un conjunto elegante color rosa pastel el cual consistía de un pantalón largo pegado a su cuerpo con una blusa de manga larga de las mismas características del pantalón, resaltaba su cuerpo de una manera impresionante.

Su cabello largo, abundante y de color negro lo llevaba suelto organizado en unas hondas que complementa muy bien su look, para finalizar unos tacones del mismo color, y su maquillaje espectacular.

-¿Te organizas así solo para ir a un centro comercial? -La esposa se encontraba en su tocador dandose unos últimos retoques a su maquillaje, ante sus palabras esta volteo y lo miro de manera seria.

-Es últimamente que te molesta eso de mi, John.

-No me molesta Olivia, pero tienes que entender que yo ya tengo 50 años, tu eres una mujer joven, hermosa...

-No empieces con tus inseguridades por favor. Llevamos 20 años juntos.

-Contigo no se puede hablar o llegar a un acuerdo.

-¿Acaso quieres que me deje de maquillar o algo así?

-Sería lo mejor amor, no necesitas maquillaje, no necesitas usar ropa tan... Sexy.

-¿Sexy?, John, de verdad que tu no eras así, mejor me voy a preparar a los niños por que tienen que ir con nosotros.

John sin pensarlo dos veces tomo a Olivia por el cuello sin hacerle mucha presión para no dejarla sin aire pero si para manipular su cuerpo.

-Tú a mi no me ignoras.

-John... -Olivia estaba en un shock total, su esposo nunca había puesto una mano encima de ella, no de esa manera, se encontraba asustada y sin palabras.

Un llanto apareció en la pequeña radio que esta conectado al cuarto del bebé, avisando que el pequeño Liam había despertado.

-Sueltame John... Mi bebé esta llorando -Le decía con lágrimas en sus ojos.

Aquel hombre la soltó por fin y con la cabeza le hizo una señal de que se largará de una vez.

La morena salió de su cuarto matrimonial hacia el tercer piso donde se encontraba el cuarto de su bebé, ella se encontraba anteriormente en el segundo piso de la casa que su esposo le había regalado, aunque no si ella es sincera consigo misma, no reconoce a su hombre en este momento.

Al llegar al cuarto tomo a su pequeño bebé de tan solo 1 año en brazos, empezó acariciarlo, hablarle, arrullarlo, y así su llanto poco a poco se volvieron risas.

-Oh mi Liam bello, hace muy poco estabas en mi vientre...

Mientras la chica calmaba al bebé del hogar, John se propuso a vestirse y organizar un poco su barba para no verse tan mal al lado de la diosa que tiene como esposa.

Luego de unas dos horas entre bañar y organizar a Liam junto con James de 5 años, por fin lograron tomar sus cosas personales como bolsa, dinero, identificación, para salir de casa en uno de sus autos, específicamente en una camioneta 4x4 blanca que John hace poco le obsequio a Olivia por su cumpleaños.

John iba a ser quien conduciria esa vez, la pelinegra de copiloto a la par que sus dos hijos quedaban en los asientos de atrás en sus sillas especiales para que estén seguros dentro del auto.

Cuando aquel hombre se dispuso arrancar el motor de la camioneta miles de pensamientos invadieron la cabeza de Olivia, se sentía triste, decepcionada, asustada, no quería perder su matrimonio, su esposo nunca la habia golpeado, nunca había presentado actitudes celosas o posesivas, aquel pequeño infierno empezó hace unos meses cuando John cumplió sus 50 años.

Miraba por la ventanilla de la camioneta las calles de Los Ángeles, observaba las personas, los edificios, los otros autos, mientras que miles de preguntas con respuestas tratando de justificar la agresión de John, daban vueltas a la cabeza de la morena. En su mente repitió una, otra y otra vez.

-Tal vez solo fue por esta vez...

Capitulo en edición.