"Un par de copas" →Yoonmin

13

Jimin tenía mucho en que pensar, principalmente en qué era lo que debía hacer. Estaba por tomar una decisión que le cambiaría la vida por completo. 

Aunque para él, no importaba que fuese lo que eligiera, de todas maneras, las consecuencias lo acompañarían por el resto de su vida.

Ese día de universidad, se sentía bastante cansado y tenía mucho dolor de cabeza. Y a pesar de que hubiese preferido irse a casa de una vez, decidió pasar a la enfermería por algún consejo para poder aliviar sus males, pues era consciente de que su estado no le permitía tomar medicamentos.

Al abrir la puerta sin avisar, se encontró con la sorpresa de encontrarse con Lee; quien sentado en la camilla de la enfermería, tenía entre las piernas a un hombre con bata blanca que no logró identificar.

Jimin abrió los ojos con perplejidad, pues a pesar de que el hombre que se encontraba de espaldas no había notado su presencia, el pequeño rubio de ojos claros lo miraba con frialdad e indiferencia mientras recibía embestidas del adulto sobre él. Cuando el hombre estaba por percatarse, Lee lo abrazó y comenzó a besarlo. 

Jimin de inmediato salió, cerrando la puerta con cuidado. 

—¿Ahora como me saco eso de la cabeza? —se preguntó así mismo con vergüenza, mientras avanzaba con pasos rápidos por el pasillo.

—¿Qué cosa? —apareció Jungkook a su lado. 

—¿Qué haces aquí? —intentó cambiar el tema. Jungkook levantó una ceja.

—Terminé mis ensayos antes de lo previsto y quise venir a verte. 

—¿A mí?

—¿Qué fue lo que pasó antes de que te encontrara? Te veías pálido y asustado.

—Nada. —Comenzó a caminar a la salida.

—¿Terminaron las clases? —dijo, mirando hacia la dirección de la que venía el peligris.

—Si vinieras a la universidad, lo sabrías —se burló.

—Tonto —chistó. 

—¿Qué tal tus ensayos?

—Bien. —Se encogió de hombros—. Son bastante pesados, ahora que estoy a un año de presentar mi debut. 

—Eso es genial, Jungkookie. 

—¿Y tú?

—¿Yo qué? 

—¿Cómo te encuentras? Jackson me dijo que te fuiste con tu madre. Pasó una semana y ya no te vi porque me fue necesario salir por mis entrenamientos —explicó—. Por eso vine a verte.

Jimin lo miró mientras llegaban a la salida, deteniéndose justo en esta.

—Gracias por preocuparte Jungkookie. Lo aprecio bastante —sonrió un poco—. Prometo contarte todo muy pronto, pero ahora mismo debo salir y estaré bastante ocupado.

—Está bien —dijo, regresándole la sonrisa—. Cuídate mucho. —Miró el reloj en su muñeca—. Yo también debo irme.

Jimin asintió, para después cada quien ir por su camino. Cada uno teniendo diferentes preocupaciones por atender.

El peligris se dirigió hacia aquel lugar que le traía muy malos recuerdos. Observó por un par de segundos la entrada y después de pensarlo muy bien, prefirió darse la vuelta y regresar.

Terminó yéndose hacia el departamento con Jackson en lugar de ir al hospital como el señor Min se lo había ordenado.

Sabía que tal vez eso era mala idea, pero por primera vez quería tomar una decisión que no contradijera lo que él quería.