𝙇𝙞𝙩𝙩𝙡𝙚 𝙖𝙨𝙨𝙖𝙨𝙨𝙞𝙣

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟼

A la mañana siguiente, su rutina fue la misma. Solo, que ahora, su cabeza estaba llena de pensamientos confusos. Pensaba, e incluso le habían dicho de que nunca tendría contacto con los demás de su edad, que llegaba a ver cuando iba a comer (aunque eso pasaba muy raramente).

Escucho su puerta ser tocada y desvió su mirada hacia ella. Camino hacia la puerta y al otro lado noto al adulto que lo esperaba cada día.

-¿Cómo es?- pregunto saliendo al pasillo recibiendo una ceja alzada del adulto -Mi compañero, ¿Es de mi edad?, ¿Cómo es?, ¿Es inteligente o es un tonto?- 

-Calla Izuku- puso un dedo sobre sus labios -No voy a contestar a ninguna de tus preguntas- negó con  su cabeza -Tu mismo te contestaras, sígueme- quito su dedo de sus labios y tomo la iniciativa de caminar.

Con un pequeño puchero, Izuku siguió al adulto por el pasillo, como lo hacía cada día, solo que ahora sería para conocer a alguien más. Raro.

Divago en sus pensamientos mientras iban hacia una habitación —suposición de el—¿Cómo sería su compañero?, ¿Podrían llevarse bien luego de no tener contacto con niños de su edad durante más de 5 años?, No lo sabía y eso lo asustaba.
Le asustaba que no encajaran bien. Y si eso pasaba...no quería que sufriera el otro niño.

¿Y si eso pasaba? La verdad, culparian al nuevo, ¿Porqué? Fácil, el sabía que era el favorito, tantas veces se lo dijeron que llegaba a cansarlo.

-Llegamos- escucho el anuncio del adulto y dirigió su mirada hacia la puerta con contraseña -Podran hablar de lo que quieran, la habitación no tiene micrófonos ni cámaras- miro de reojo al pequeño mientras ponía la contraseña.

Cuando la puerta se abrió, dejo ver una amplia habitación con la iluminación un poco baja para su gusto.

Miro con miedo al adulto quien le asintió con la cabeza, no tenía opción. Infló su pecho y se mentalizo que todo saldría bien, en el mejor de los casos haría un buen equipo con el chico, por algo lo habían elegido a el, ¿No?

Dio unos escasos pasos y al pasar la puerta se cerró al instante. Camino más al centro de la habitación notando que no habia nadie, tal vez tardarían un poco con el nuevo.

Se sentó en el frío suelo y soltó un suspiro, solo le quedaba esperar.

Se movió por décima vez en el suelo, sin encontrar un acomodo.

-¿Cuánto tardará?- refunfuño recargando su cabeza en su mano, dejando su mirada perdida en el suelo.

Volvió a tomar consciencia cuando escucho pasos afuera de la habitación, enfoco su mirada en la otra puerta que estaba y movia una de sus piernas frenéticamente.

Cuando vio que la puerta se abrió se levantó rápido del suelo y miro expectante.
Una vez que la puerta se abrió por completo, pudo ver al fin a su compañero.