Seungmin no debería estar pensado en lo bien que huele Jeongin ni en lo mucho que desea hacerlo llorar.
______________
¿Cómo Jeongin terminó con un vibrador mientras ensayaban? No tiene ni la menor idea pero Seungmin tampoco le dejó pensar mucho en ello. Presionando y empujando hasta llevarlo al límite.
—Alfa-. —se quejó apenas, con la voz demasiado temblorosa.
El alfa chistó negando e ignorando su presencia tan indiferentemente que tenía al omeguita lloriqueando por su atención. Soltó otro sollozo e intentó moverse en busca de una posición que no lo hiciera sentir como si estuvieran jodiendo sus órganos. Era imposible. Cada mínimo movimiento lo tenía llorando.
Las vibraciones eran irregulares yendo de arriba a bajo tan fuerte que lo hacía ver blanco.
Jeongin apretó el borde de la mesa frente a él.
—Por favor, alfa. —rogó en un hilo de voz. La garganta seca por el llanto y su coño chorreando inmensurable.
Hubo un pequeño gruñido que le hizo tensar. Seungmin le daba la espalda mientras continuaba trabajando pero aunque continuó sin girarse a verlo, algo cambió en la tensión de sus hombros haciéndole saber que sus ruegos le afectaban aunque mostrara desinterés.
Jeongin lloriqueó avergonzado y un poco enojado. Dolía demasiado. Era un dolor intenso y placentero pero no era suficiente.
—Silencio omega. —ordenó en un tono sin ningún tipo de calidez y continuó divagando frente a su computador. —Sabes lo que debes hacer. Termina tu trabajo antes de que tus hyungs se enfaden. —indicó con un aire cínico en su voz. El alfa finalmente se giró a observarlo, sus ojos se deslizaron por todo su cuerpo y sonrió de lado. Seungmin siempre lo miraba como a su juguete favorito. Jeongin hizo un puchero lloroso y dejó escapar varias de sus feromonas. —Oh cachorro no lo intentes, verte así solo me calienta más. —tarareo sonriente. Y dejó una acaricia brusca en su cabello que lo hizo gimotear.
Seungmin llevó una de sus manos debajo de su falda y se burló de su húmedo coño, deslizando dos de sus dedos por su pequeño botón. Chillo aferrándose a la muñeca del mayor con ambas manos.
Jeongin necesitaba correrse. Necesitaba tener una polla real que lo anudara y llenara de espeso semen.
Jadeo. —Por favor, alfa. —sollozo. —No puedes ser malo conmigo ahora. —tartamudeó sintiéndose tan caliente que podría derretirse. Había sido una terrible idea ir a trabajar esa mañana aún sabiendo lo intenso que estaba empezando a ser su calor y el que estaría a disposición de Seungmin completamente a solas. —Necesito correrme.
Seungmin solo aumento las vibraciones de aquel juguete riéndose por sus ojitos llorosos y disfrutando del rubor que se adueñaba de su carita de muñeca.
El alfa quería destrozarlo.
Tomó un puñado de su cabello y lo acercó hasta que sus rodillas chocaron y Jeongin jadeo silenciosamente a centímetros de su boca.
—Si puedo, cariño y lo estoy haciendo. —murmuró sin inmutarse.
La mano que había estado acariciando su coño se deslizó hasta su agujero abierto por el vibrador en el, Seungmin lo delineó.
—Le diré a Chan hyung. —se quejó frustrado. —Sabes que no debes-. —Cada vez era más difícil mantener a raya su calor. Su celo podría explotar en cualquier momento. Lo que lo tenía sensible. No se sentía con el ánimo de ser torturado pero eso era lo que más alentaba a Seungmin.
