right where you left me (binwoo - song-fic)

Right there...

Había ido a unos pares de shows del Coachella en Los Ángeles, había recorrido un par de lugares que me parecían únicos en Estados Unidos y me sentía tan feliz de tener unas mini-vacaciones para mí, a pesar de estar con gente de la empresa, ellos disfrutaban conmigo y me sentía tan libre. Sabía que si bebía, fumaba o quisiera comer todo lo que se me antoje, no le dirían nada al presidente como para que me molestara, entonces, los recompensaba con días libres o comidas en grupo que me hacían sentir acompañado.

Había viajado sin ASTRO, sin mi Binnie... Él estaba demasiado ocupado con los conciertos de la subunidad para DIFFUSION en el que estaba con Sanha, pero lo extrañaba demasiado, y él lo sabía, nos llamábamos todos los días y nos mandábamos todo tipo de fotos que una pareja de más de 8 años se manda. Éramos como una pareja de casados. Sí, él era mi alma gemela, mi todo. Me dolía dejarlo en otro país y tan lejos, pero él siempre me decía que el recibimiento sería super especial, y así lo era siempre que él o yo nos íbamos de viaje a otro lugar, siempre la bienvenida era algo especial y eso me tenía loco.

 — Realmente me pidió el divorcio así como así... ¡Lo odio! Por lo menos hubiese esperado que regresara a Corea — se enfadó mi maquillista, Jane. Todos sabíamos que su relación andaba mal, e incluso ella misma estaba esperando el momento en que él cortara la relación, pero por alguna razón, ella nunca se hubiese imaginado que lo haría estando en Los Ángeles.... Aunque yo sí. Era típico de ese tipo de hombres.

— Te dije que buscaría el momento de dejarte mal a ti, es lo típico... — le respondí, resoplando y comiendo mi helado. Me enojaba que sean así con las personas que yo apreciaba. Eran personas realmente bonitas en todo sentido y un montón de hombres que no sabían comportarse lo arruinaban todo para los demás.

— Tú lo tienes fácil porque Bin te ama con locura y tu relación es irrompible... Yo me casé con este tipo porque sólo me lo pidió y creí que mi hora ya pasaba —

Toda la empresa sabía perfectamente que yo era gay y que mi pareja era Bin, e incluso, lo sabían las co-estrellas que tenía en algún drama, no era algo que no se supiera entre los allegados, pero, debíamos ocultarlo muy bien por mi fama y la sociedad coreana (e incluso de muchos países), nadie me aceptaría si se supiera a los cuatro vientos que a mi me gustaban los hombres y yo quería seguir con mi vida actoral y mi vida de idol porque sentía que era para lo que yo nací. Bin pensaba igual, aunque él era muchísimo más liberal tanto ante como detrás de cámaras que yo, también quería seguir con su carrera por lo que ambos sabíamos que era mejor mantenerlo en secreto.

Los amigos se separan

Los amigos se casan

Los desconocidos nacen

Los desconocidos son enterrados

Las modas cambian

Los rumores volarán por los nuevos cielos

Pero yo sigo exactamente en donde me dejaste

Caminamos y recorrimos lugares, me tomé algunas fotos para mandárselas a Bin y para publicarlas en instagram, ya medio cansado, y con algo de hambre, decidí que era mejor quedarnos a comer algo en algún restaurante:

— ¿Qué restaurante o qué lugar sugieren para comer? ¡Me muero de hambre! — me quejé y todos sonrieron, estando de acuerdo.

— ¿Quieres ir a ese restaurante de pizza al que fuimos la otra vez? — me preguntó, esta vez, mi fotógrafo: Ross; y no sé qué cara habré puesto al asentir que todos rieron enternecidos. Refunfuñe con los brazos cruzados, yendo al restaurante italiano en donde más me gustaba la pizza, y ellos seguían en sus conversaciones. Recibí un mensaje de Bin, había vuelto a su casa y estaba por prepararse algo de comer... Le mandé varias fotos que me había sacado y me respondió con varios stickers de corazones y de enamorado.