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Estoy parado en la puerta esperando a que sean abiertas para ingresar al salón de bodas, los nervios se están apoderando de mí, estaba tranquilo hasta hace 3 segundos y todo por culpa de un olor que me hace erizar la piel.

-Joven Byun ¿Se encuentra bien?- veo al wedding planner y trato de asentir mientras sonrió, pero creo que lo que ella ve es a un loco moviendo la cabeza a todos lados con una mueca horrenda en la cara – Tranquilo, usted es un novio muy lindo y todo está saliendo perfecto –

-Gracias – ella coloca su mano sobre el auricular.

-Es hora- tomo una respiración profunda, sostengo el ramo en mi mano con fuerza, abren las puertas y todos se colocan de pie. Camino por el pasillo mientras todos los invitados me ven, siento que voy a entrar en pánico en cualquier momento, y lo peor de todo es que siento que no estoy haciendo lo correcto.

4 años de relación con Kwon Hyuk-woo, no es mi pareja destinada, pero es una buena relación, o eso creo, ya en estos momento no estoy seguro de si quería seguir en ella.

Llegó al altar, él solo me ve, no veo emoción en sus ojos, no veo la intensidad de sostenerme, de tenerme a su lado, no veo nada que me diga que estoy haciendo lo correcto.

La ceremonia empieza, solo escucho una que otra palabra, y al momento de dar los votos recuerdo que no prepare nada, ¿Cómo mierda se me olvida algo tan importante?.

-Bueno- sonrió nervioso -Yo, eh- veo a los lados en busca de que alguien me rescate, ¿Por qué no podemos pasar directo al “hable ahora o calle para siempre”

Escucho como abren la puerta principal con fuerza, un hombre con un traje tan perfecto hecho a la medida y que por cierto nuca había visto entra a paso firme y expulsando feromonas a diestra y siniestra, las piernas me fallan y trato de sostenemos de algo y quien me ayuda es uno de los colaboradores del evento porque el inepto de mi “novio” no hace nada.

-Permiso, pero vengo a llevarme lo que es mío- trago y solo veo como se acerca más a mi, me levanta como si nada y me carga en su hombro.

-Mierda- todo el mundo queda de cabeza, el camina en dirección a la salida mientras me tiene como un costal de verduras en su hombro, ¿Quién me explica que está pasando y quien es este hombre que tiene un olor que me hace volverme loco?

-Deténganlo- hago mala cara, que nadie lo detenga, que me lleve a donde quiera llevarme.

-Por favor deténgase, ¿Usted quién es y que hace con el novio?-

-El novio es mi Omega, mi destinado, así que puedo llevarmelo y ustedes no son nadie paga impedirlo – me abrazó a su cintura y lo huelo, el aroma que me estaba volviendo loco era el de él, es mi alfa-

-Baje al novio –

-No- siento como expulsa esas feromonas tan dominante, son dan intensas que hace que el cuerpo me duela y pierna casi que la conciencia.

Retoma su marcha, salimos del salón de bodas, veo como los invitados tratan de salir y quien se supone era mi novio la tarde de hoy no se mueve de su lugar.

-¡Chanyeol! ¿Qué mierda estás haciendo?- miro hacia un lado y veo a una mujer vestida de novia,  de cabeza se ve hermosa, no se si colocamos derecho se vea igual. Me levanto un poco y me apoyo en la espalda del hombre que me lleva.

-Si, es hermosa- la chica me ve impresionada – Perdón, pensé en voz alta, disculpa ¿Conoces a este hombre?-

-Es mi hermano- hago una “O” con la boca – Baja al chico ¿Te estás robando a un novio?-

-Estoy tomando lo que es mío- esa voz gruesa hace que se me engrose otra cosa.

-Tranquila, me salvó- le sonrió la chica – Oye guapo, uh, ¿Chanyeo,l cierto? Mira cariño ya que no me voy a casar y tengo una cabaña reservada solo por esta noche, ¿Qué te parece si la usamos y nos conocemos y me explicas todo esto?-

-Perfecto, adiós noona, disfruta de la fiesta de bodas- retoma su marcha alejándonos de la chica, me despido con la mano mientras caminamos a la salida, más de una persona nos ve.

Siento que me baja y el giro tan abrupto me da mareos, me deja sobre el mueble de un descapotable, se sube al lado del conductor y acelera sin más.

Me acomodo bien sobre el asiento, tiró el ramo que aún tengo en mi mano al aire, suelto mi traje, me quito la chaqueta, suelto la corbata y los puños de mi camisa, el aire despeina mi cabello, le extiende mi mano.

-Mucho gusto, Byun Baekhyun- me voltea a ver, no sé en qué momento se colocó los lentes de sol, me sonríe y no puedo evitar tragar, toma mi mano y la sostiene con fuerza.

-Mucho gusto, Park Chanyeol, tú alfa-

Hable ahora o calle para siempre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora