Lo que empezó como una simple gripe y término con la mitad del planeta.
Ha dos años de casados, Enzo Vogrincic y Matías Recalt se ven envueltos en un problema que es más grande de lo que piensan.
juntos hacen grandes cosas mientras que el mundo se...
"Ha 145 días después de que todo comenzará, es hasta ahora el reto más grande al que nos enfrentamos. Papá E fue informado por tío Fran sobre un nuevo sitio el cual está infestado y tiene que explorar para encontrar cualquier cosa que nos ayude, por otro lado papá M está preocupado por lo que pueda pasar en esa expedición, tiene miedo, y yo también, ya eh perdido bastante como para perder a mi papá... Papá E va acompañado de mis tíos, están preparados para todo siempre..."
"¡Evelyn!" su escritura fue interrumpida por el grito de su tío Agustín, que la llamaba desde el piso de abajo.
"¡Voy!" cerró el diario y bajó las escaleras en espiral suspirando, ¿Ahora que querían?, siempre interrumpían su escritura por cosas bobas.
Cuando llegó a la sala principal se encontró con todos allí, sus padres, y sus tíos que estaban preparando las mochilas con munición, vendas y más cosas que serían útiles en la expedición que tenían su padre y algunos de sus tíos.
"¿Que pasó ahora?" Evelyn para sus doce años era bastante madura, pues tuvo que crecer en un mundo que se fue a la mierda en cuestión de poco tiempo, robándole así la infancia que tanto deseaba tener.
"Tus papás quieren hablarte de algo importante" le informó Agustín mientras levantaba la vista de la mochila, se notaba algo nervioso.
"¿De que?" no le gustaba esperar y todos lo sabían, Enzo les dejó saber que seguirían con el preparado de mochilas después.
Sus tíos se fueron, dejándola sola con Enzo y Matías, que se notaban algo nerviosos y cansados.
"Vení acá Eve" Señalo Enzo entre medio de ellos en el sofá maltratado que tenían allí. Evelyn les hizo caso y se sentó entre medio de ellos, esperando cualquier palabra de sus padres.
"Sabes que nunca te dejamos ir a una expedición por tu seguridad, ¿Verdad?" comenzó a hablar Matías, con tono suave y tranquilo. A él se le notaba algo más tranquilo que a comparación de Enzo.
"Ajá, decían que era por que era muy chica para ese tipo de cosas" le interrumpió ella mordisqueando su propia uña.
"Bueno... Tu padre y yo hablamos anoche, y, decidimos que ya estas bastante grande y madura como para ir de expedición" le informó Enzo, mientras que posaba su mano en el pequeño hombro de la niña. La mirada de Evelyn viajó de Enzo a Matías y viceversa, buscando algún indicio de broma, algo que le dijese que ellos estaban bromeando. No encontró nada.
"¿Si puedo ir? ¿Encerio? ¿Esto no es una broma?" las preguntas se le salieron solas mientras miraba sus propias manos, Matías y Enzo se miraron por encima de Evelyn y sonrieron con algo de burla.
"Si amor, podés ir conmigo a las expediciones" Vogrincic le aclaró las dudas y la niña no dudó un segundo en abrazarlos a cada uno, sonriendo y bastante feliz. Hacía tiempo que querría ir a una, pero sus padres simplemente se lo prohibieron hasta que no tuviera la edad suficiente y el entrenamiento necesario.
Siempre eran sus dos padres juntos los que iban y ella se quedaba al cuidado de Valentino, pobre él que tenía que aguantar a la niña hablar de puras armas.
El preparado de mochilas siguió después de esa notícia, guardaban lo necesario para poder salir de ahí vivos y sin ninguna mordida o herida grave.
Hubo una vez que Enzo volvió con un gran corte en su pierna que lo dejó sin caminar por tres días, tenían suerte que Esteban tenía medicina y vendas a disposición. Pero dejando eso de lado.
Evelyn junto a su padre, Enzo, salieron acompañados de Blas y Juani hasta afuera de la casa, donde estaban Felipe y Simón cuidando la entrada. Todo el alrededor de la casa estaba bloqueado por rejas y trampas para osos.
"¿Eve? ¿Ya te dejaron salir?" la pregunta burlona de Simón la hizo reír, asintió y siguió su camino al lado de su padre hasta las afueras de la casa, donde daba hacia un gran campo.
Si seguían ese camino llegarían a la cuidad, y a su objetivo, que descubrió era un antiguo Hospital abandonado relativamente cerca de una casa abandonada para poder pasar la noche.
Caminaron y caminaron por el sendero, a plena luz del día. Evelyn no se cansaba fácil, y se sabía por todo el entrenamiento que tomaba con Agustín.
"Una vez estemos allá quiero que protejan a toda costa a Eve" les dejó saber Enzo a los más jóvenes. Estos asintieron y siguieron el camino.
Evelyn hasta el día de hoy no se olvida la vez que conoció a sus padres en aquella cabaña, pero para eso hay que volver el tiempo atrás... Para ser exactos, 145 días.
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Historia nueva, espero reciba el apoyo que le estan dando a la otra.
Sin más que decir, los quiero y espero disfruten la lectura.
