Arlette Chadwick es enviada por sus padres a un pueblo en Colorado para "recapacitar" sobre su mal comportamiento escolar.
~ My life with the Walter boys fanfiction ~
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—¿Crees que es demasiado? —preguntaba Isaac a su hermano encerrados en su habitación
—A ver Isaac, he visto como la miras, y una salida al cine no es tanto, tienes que atreverte, lanzarte —dijo Lee gesticulando con las manos, mientras veía a su hermano, quien se daba almohadazos contra su cabeza
Luego de la escena en The Lark, Isaac se cuestiono sus sentimientos hacia la rubia, ¿que sentía?, ¿sus sentimientos iban mas allá de una amistad?, pero de lo que estaba seguro, era que se sentía realmente bien cuando estaba con Arley.
—A demás ya compraste los boletos, creo que deberías haberlo pensado antes, pero anímate, obviamente te va a decir que si, también he visto como te sonríe —le guiño un ojo
—¿A que quieres llegar con eso Lee? —pregunto confundido, levantando la cabeza del cojín
El pelinegro bufó —Que esas miraditas no son de amigos, Isaac, Dios, no se cual de los dos está más confundido —respondió como si hubiera pasado por tres divorcios— a demás, no se por qué me preguntas esto a mi, se supone que tu eres el experto en chicas
El mayor seguía dudando, hasta que se decidió —Esta bien, iré a preguntarle
—Ese es mi hermano, ¿desde cuando a Isaac Garcia le da miedo invitar a salir a una chica?
El chico se levantó de la cama y acomodo su ropa, abrió la mesita de luz a los pies de su cama y sacó dos boletos de cine.
Salió de su habitación, y se dirigió hacia la de Arlette, mientras repetía en su cabeza una y otra vez las palabras que usaría con la chica.
Golpeó dos veces la puerta y entró al escuchar un "pase" desde dentro
La rubia, quien se encontraba ordenando una ropa en el closet, sonrió al ver de quien se trataba —Hola Isaac, entra, ¿paso algo? —dijo la chica guardando el último vestido que le quedaba y volviendo a su cama
—Hola Arley, no, no paso nada solo... venia a preguntarte algo —respondió con timidez, la chica lo miro, esperando a que siguiera hablando— quería preguntarte si querías ir conmigo al cine —le enseñó los boletos— a ver una película, los dos —siguio, dando pausas en el proceso
La rubia fingió pensar, lo que le hizo ponerse más nervioso —Claro, cuando y a que hora
El pelinegro sonrió —Mañana a las 3:00pm
—Bien
El chico salió de la habitación y se dirigió a la suya, con una sonrisa gigante en su rostro
—¿Te dijo que si? —pregunto el hermano viendo la cara de este
—¡Me dijo que si! —confirmo emocionado
Por otro lado Arlette le escribió de inmediato a su amiga
