Prólogo.

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(A veces es confuso como funciona la vida, en un día eres una demonio sin compasión alguna que solo hacías lo que tú capricho pedía, enfocada en acabar con esos molestos cazadores de demonios feos y tontos... Sin embargo ahora estás juntos con esos mismos cazadores que casi terminan con tu vida y la de tu hermano en la Finca, si. Lugar donde se reúnen los Pilares.

Curioso ¿No? Quien diría que vivir tanto te daría anécdotas cada vez mas confusas.)

Eso pensaba Daki Shabana, Ex-Luna Superior junto con su hermano mayor Gyotaro Shabana, Ex-Luna Superior, ambos ocultos en las chozas que habían en la Finca, parecería una mentira que sigan con vida después de batallar a muerte con los Cazadores de demonios y un Pilar. Aunque lo que los dejaba con mayor incredulidad es que el Patrón, aquel que comanda a todos los cazadores, aquel que está por encima de los Pilares y principal enemigo de Muzan, no solo les perdonó la vida sino que les permitió quedarse en la Finca, confiando en sus palabras de que podrían cambiar y enderezar su rumbo.

     Los hermanos demonios eran consciente que no eran buenas personas, al ser demonios tuvieron la sangre fría como para hacer sus actos más ruines y deleznables. Siempre pensaron en supervivencia y en protegerse ellos mismos, solo importaba eso para ellos aunque cada vez no podía fingir estar cansados de tener que quitar una vida, cada día, de cada mes, de cada año, por décadas. Al principio creyeron por ser esos demonios sin corazón y capaces de ser todo lo malo posible aunque una característica de tener una vida longeva es la gran cantidad de tiempo para pensar.

    Cada vez que esos días eternos pasaban, era más insatisfactorio. No podían evitarlo aunque su infancia hasta ahora a Sido una completa mierda y que el mundo les debe algo, la culpa, remordimiento se afloraba en ellos, solo querían descansar o buscar paz, sin tener que estar al pendiente de cualquier peligro. Ninguno puede decir que se merezcan otra oportunidad pero prefieren tomarla tomando los riesgos que vivir eternamente en un ciclo de muerte e insatisfacción que duraría para siempre.

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Tiempo Después

     Tanjiro, Zenitsu e Inosuke llegaron cansados por la exigente misión, Inosuke iría a buscar comida mientras que Tanjiro fue a llevar a su hermana a tomarse un baño y Zenitsu sin siquiera cambiarse o hacer algo más que llegar, Zenitsu solo se acostó directamente en su futón, no tenía planes de hacer algo. Su agotado cuerpo cae en el cómodo futón para recuperar fuerzas, lastima que un peso sobre el impidiera que agarrara sueño.

Zenitsu: Agh...! -Se queja al instante al sentir el peso que cayó sobre él.

Daki: Haces un comentario que estoy pesada y te doy verdaderos motivos para llorar -Comentó la albina ante el rubio.

Zenitsu: Hola Daki... -Saludó aunque sin parecer tener ánimo alguno, ni siquiera despegó la mirada de la almohada.

Daki: Estuve esperando, quiero ir pasear el campo —Expreso motivada.

Zenitsu: Quiero descansar -Expresaría del rubio sin abrir los ojos y sin intenciones de ir.

Daki: Pero estoy aburrida -Exclamó la demonio.

Zenitsu: Mañana -Dice para tranquilizar a la albina.

Daki: Hoy -Insiste la demonio de ojos color esmeralda.

Zenitsu: Ten piedad de mí... -Pide el rubio.

Daki: Llegaste herido? -Cuestionó la albina.

Zenitsu: Algo adolorido ... -Expresó el rubio.

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⏰ Última actualización: Oct 04 ⏰

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Eres Mi Mundo - Daki X ZenitsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora