De la Mafia al Amor?

CAPITULO 3

      

"Lo importante es ver aquello que
Resulta invisible para los demás".

   
Ya han pasado varios días y según los médicos han visto mejoras en mi cuerpo pero sinceramente aún sigo en terapias, no me dejan salir de ese lugar para absolutamente nada, me he intentado escapar pero Luke y jaxon no me han dejado. Son tan odiosos, a veces se ponen de acuerdo para cuidarme y ponerse a hacer guardia. Acaso se creen vigilantes?

Respecto a mi memoria pues...voy recordando de a poco cada vez que me parece haber vivido la situación antes, recuerdo mucho más a Jaxon, al Cisne negro y un poco de lo que pasó antes del accidente. Sobre el cisne negro recuerdo que llegue a su casa corriendo de algo o alguien, me dijo que era mi padre y trato de explicarme pero huí, alguien me escoltó hasta un almacén abandonado y habían escoltas y varios hombres, entre esos el chico que atormentó mis pensamientos junto con algunos otros hombres más. El chico borroso de mis recuerdos me miraba con tristeza mientras estrechaba la mano con alguien que odio mencionar.

Dante.

Sin embargo no logro poder ver bien y saber quién es el chico, si está vivo o murió, si tuvo que ver con lo que me pasó o lo que pasó con mi madre! Carajo.

Sobre Dante, se lo que muchos saben,  mato a mi madre y no la pude salvar es algo que llevaré en mi mente y en mi corazón hasta el día de mi muerte. Cómo muchos saben Cassandra era como mi hermana y ya no duele recordarla tal vez un poco, si, pero por su culpa mi madre también murió, por dispararme y por traer a Luke a este jodido mundo bajo amenazas.

No sé que sentiré al verla, pero solo se una cosa, si la veo no descansaré hasta que me suplique por su vida tal y como estuve apunto de hacerlo yo porque no les miento tuve miedo a morir y más cuando fue ella quien casi acaba con mi vida.

En qué momento cambio tanto? Que le hice?

El sonido de la puerta me saca de mis pensamientos y me devuelve a la dura realidad.

—Bonita vamos, tienes terapias en diez minutos, arriba!—jaxon entra feliz en la habitación y dándome un abrazo al cual correspondo y el sonríe ampliamente.

—vamos hermanito, por favor sácame de este lugar ya estoy cansada de ver las jodidas paredes blancas. Esas terapias para que? Dame una pistola y me recupero de inmediato.—el suelta una carcajada lo cual me hace reír también.

—como se te ocurre que te voy a dar una pistola, tienes que recuperarte primero y luego veremos qué se hace.—dice ayudándome a levantar y quedar sentada. Joder esto es lo que más duele de levantarse. Me pongo de pie y el dolor me hace cerrar los ojos y morder mis labios. Está es la parte en la que Jaxon me las va a pagar, lo juro.

—muy bien, ahora camina a dónde mi, y deja de mirarme con esa cara de amargada.—dice riendo y lo fulminó con la mirada. Bien ahí vamos, un paso al frente y el dolor va disminuyendo así logro dar varios pasos sola hasta que el dolor vuelve y me hace cerrar los ojos, al abrirlos jaxon ya estaba al lado mío ayudándome.

Parezco recién nacida aprendiendo a caminar, espectacular! Que dirán mis enemigos.

Caminamos por los pasillos solitarios y llegamos al lugar al que no quiero entrar ni porque me pagarán millones. Volteo hacia atrás y veo a Luke corriendo hacia mi agitado.

—joder! Llegué—dice agitado dándome un abrazo, Jaxon se ríe y le da su turno de cuidador a Luke porque tiene que ir a trabajar o no se a donde. Carajo, no puedo caminar sola. Jaxon se despide de mi, me da la charla que ya me se de memoria y luego sale dejándome con el irresponsable de Luke.

Les diré lo que pasará a continuación, se va a sentar y se va a tomar un café mientras mira su celular, viendo como yo sufro para luego decirme que soy fuerte. La chica encargada de las terapias se acerca a mi con una sonrisa y me ayuda a ir a la sala que ya la estoy comenzando a odiar. Me pone un tipo de arnest que me conecta a unas máquinas y estas se enganchan a mis piernas como una especie de extensión para poder afirmar las piernas sin caerme,
Luke me mira atento y para mí sorpresa no sostiene un café y su teléfono esta boca abajo sobre su pierna. Que le habra pasado?

Salgo de mis pensamientos cuando la caminadora empieza a funcionar y tengo que seguirle el ritmo. Mierda, duele pero ya no como antes, la primera vez fue horrible, imposible soportar el dolor, pero ahora he entendido que el dolor es mental. Pero aún así sigo odiando esto. Empezaré a valorar la vida señoras y señores lo prometo.

La enfermera le sube la velocidad a esa bendita caminadora y empiezo a ver el cielo y el más allá. Me está haciendo ver estrellas! Por qué carajos le subió la velocidad!

—luke! Mierda sácame de aquí! Te doy lo que sea, pero por favor.—digo cerrando mis ojos y mentalizado que el dolor va a pasar y que es por mi bien—,Esto de la recuperación es jodido Luke, porque carajos eso si no me lo dices.—digo agarrada a las barandas de metal mientras mis piernas empiezan a tambalear un poco pero nada que no controle. Parezco un robot dañado.

—solo haz bien el ejercicio, vos te quejas tanto, dale uno, dos, uno, dos.—Va contando como si fuera una escalada a una montaña lo que me hace soltar una carcajada y el me sonríe—, si ves lo linda que te ves si sonríes amargada. ¿Desde cuándo soy amargada? Alguien por favor que me lo diga porque yo estoy formateada.

—Sabes dónde está mi hermano?—luke  llega a dónde mi, apaga la máquina y hace una seña a la enfermera que se retire, al fin! Me ayuda a quitarme todo, esos jodidos aparatos me hacen tener la  fuerza de un dios pero ya sin ellos parezco un zombie recién nacido que no sabe ni como caminar.

—A jaxon? Pues el hace unas horas estaba aquí, no me digas que has olvidado que el mismo te ayudo a venir acá.—luke me pone una mano en mi cintura pasando por detrás de mi cuerpo y yo pongo mi brazo alrededor de su espalda para apoyarme.

—Obvio que recuerdo que el me trajo, pero a dónde fue? A la DEA?—lo miro y el me mira con los ojos entre cerrados, y me hace una seña que salgamos, mi momento ha llegado!—,Quieres desayunar algo fuera de este lugar? Que ya estoy cansada de estar encerrada en este hospital.—realmente ya me case de estar aquí, no sirvo para estar en un solo lugar quieta y sin salir.

—Emily sabés que no puedes salir de aquí, se supone que estas muerta mi vida  así que es un rotundo no.—casi se me olvidaba que había muerto, pero bueno los muertos también comen en restaurantes o no?

—Luke, por favor. Yo me disfrazó, me pongo peluca, o lo que sea pero vamos.—digo poniéndome frente a el para frenarlo y el suelta una sonrisa.

Joder que linda sonrisa tiene, no la había notado.

—vale, media hora, ni más ni menos después tu hermano me lleva de comida a los leones. No quiero ser comida de leones, está claro?—Me mira intentando ponerse serio y yo asiento, se perfectamente que no me puedo dejar ver y mucho menos reconocer.

  
(...)

 

En un abrir y cerrar de ojos todo cambio tan drásticamente, pase de ser una lider mafiosa reconocida y respetada por nunca fallar un arma a una que ni siquiera recuerda exactamente lo que pasó.

Es como si el mundo apenas estuviera cargando para mí, todo va llegando de poquito en poquito, hasta los recuerdos.